ATENAS.- Los restauradores creen que las fuertes lluvias están erosionando los cimientos del templo del Partenón, en Atenas, pero el gobierno local aseguró el viernes al público que el monumento de la antigua Grecia está a salvo.
El Partenón y otros monumentos de mármol de la Acrópolis llevan tres décadas sometidos a extensos trabajos de restauración, pero el agua de la lluvia que se ha filtrado en las grietas hizo que que sus cimientos se hundan, dijeron los restauradores.
Pero el viceministro de Cultura, Petros Tatoulis, señaló que no hay ningún peligro para la estabilidad del templo, dañado por guerras, terremotos, fuegos e incluso equivocados esfuerzos de restauración hace siglos.
"La cobertura de todo el piso del templo con un piso temporal durante los últimos 23 años ha secado completamente los cimientos, así que no hay ningún peligro", dijo Tatoulis por medio de un comunicado.
El arquitecto Manolis Korres, quien está a cargo de la restauración, informó en una reunión del Consejo Central Arqueológico (KAS, por sus siglas en griego) celebrada esta semana, que la falta de techo hizo que la lluvia ingrese en el templo, erosionando sus cimientos.
El piso temporal de cemento colocado en 1983 como apoyo de las grúas y de otro equipamiento necesario para la restauración, ofreció una protección a corto plazo. Su remoción cuando se acaben las obras empeorará la condición del templo, explicó.
"Cuando el techo del Partenón se cayó, el agua empezó a filtrarse por las vetas. Esto volverá a aumentar cuando se retire el suelo temporal", dijo Korres ante el KAS según fue citado por la prensa local.
Según el arquitecto, su equipo estudia levantar un techo sobre el edificio del siglo V antes de Cristo para detener los daños, pero Tatoulis descartó esta opción.
"La construcción de un techo sobre todo el templo no está bajo estudio", dijo. "Cuando se retire el suelo temporal, se rellenarán todas las grietas con nuevos bloques de mármol y volveremos a probar (la estructura) por si se necesitan medidas adicionales de protección".
