TEGUCIGALPA.- El líder del opositor Partido Liberal, Manuel Zelaya, instó a dimitir la noche del lunes al presidente Ricardo Maduro por supuestamente desconocer los resultados de las elecciones generales realizadas en Honduras.
Advirtió que "la negativa de Maduro a admitir la derrota de su partido (el Nacional) es de sumo peligro para el país... y, por eso, no respondo de lo que le suceda a nuestro sistema democrático si Maduro continúa en esa posición".
Calificó a sus contrincantes de estar "cegados por la pasión porque de forma abrupta, sin mucho análisis, crean la incertidumbre en Honduras".
Zelaya acusó también al "flamante presidente Maduro" de "no reconocer las tendencias que marcan los comicios, pero el pueblo no es tonto, tiene suficiente sentido común y vota por quienes desea".
Le advirtió al presidente estar "jugando con fuego... y el Partido Liberal tomará cartas en el asunto y a partir de este momento ha hecho público el irrespeto (de Maduro) a la soberanía popular".
Dijo asimismo que "hay que ponerse de rodillas ante Dios porque el gobierno (de Maduro) no seguirá en el poder, actuar con violencia y crear un cisma... Maduro ya ha hecho suficiente daño a este país y debe retirase de la presidencia e irse a su casa".
Zelaya exhortó a sus correligionarios que estuvieron en las mesas electorales a "venirse el martes a Tegucigalpa con los votos para analizar lo que hubo en el proceso".
Por esa razón anunció haber suspendido un viaje que haría a El Salvador para reunirse con el presidente de ese país, Tony Saca.
Maduro no se ha pronunciado al respecto.
En rueda de prensa, sin embargo, negó versiones de prensa que indicaban que el ejército estaría en estado preventivo de alerta ante los inciertos resultados de las elecciones del domingo.
Calificó la justa como "una fiesta cívica, pero cerrada, la más cerrada de los últimos 25 años de la vida democrática de la nación".
Sostuvo que "creo que hay confusión (sobre los resultados del evento) y es absolutamente prioritario que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) publique rápidamente los datos oficiales".
El gobernante se reunió por separado con Zelaya y el candidato presidencial del Partido Nacional, Porfirio Lobo Sosa, a los que exhortó a "mantener la calma" ante la incertidumbre electoral.
Las reuniones fueron convocadas luego que el Nacional,no aceptó la derrota en los comicios, aunque Zelaya se ha autoproclamado el vencedor.
La escasa información electoral que ha puesto incertidumbre sobre el resultado ha surgido por fallas técnicas del tribunal, TSE, que regula el proceso.
Los únicos resultados que se han manejado son los de una firma privada, a boca de urna, que señalan que Zelaya fue favorecido con un 50,61% del sufragio, mientras que su contrincante del Nacional, Porfirio Lobo Sosa, habría obtenido el 44,31%.
Zelaya, de 52 años, fue declarado presidente electo por Arístides Mejía, que encabeza el TSE. Sin embargo, la proclamación debe ser hecha por los cinco magistrados del tribunal, según la legislación electoral.
Mejía, que es correligionario de Zelaya, no ha explicado todavía porqué el TSE se ha demorado en divulgar los resultados de la votación, pero instó al candidato oficialista a reconocer su derrota.
"Lobo Sosa debe admitir que hay un vencedor (en las urnas)", dijo Mejía a canal 5 de televisión.
Anunció que, pese a que se había escrutado apenas el 10% de los resultados de los comicios, "los hondureños ya tenemos un presidente electo... y ese es Zelaya".
Se estima que la tendencia indica que hubo un abstencionismo del 41%. En el proceso estaban habilitados 3,9 de 7 millones de hondureños.
Además de presidente, los votantes eligieron un vicepresidente, 128 congresistas y 298 alcaldes.
En la contienda participaron los dos partidos históricos, que han gobernado más de un siglo a Honduras, y los minoritarios Innovación, de tendencia socialdemócrata; Democracia Cristiana, de centroizquierda, y Unificación Democrática, de izquierda.