LA HABANA.- Encabezados por el presidente Fidel Castro, los militares cubanos recordaron el viernes el desembarco del yate Granma en 1956 —el inicio de la lucha guerrillera en Cuba— y el 30 aniversario de la ’’Operación Carlota’’, como se llamó a la participación de los isleños en las luchas por la independencia de Africa.
El 2 de diciembre es considerado en esta nación caribeña como el Día de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR).
Vestido con su uniforme verde olivo y rodeado por comandantes veteranos, Castro destacó el papel de la isla en el proceso de descolonización —especialmente de Angola y Namibia— y el fin del apartheid en Sudáfrica, y criticó la actitud de Estados Unidos que trató de frenar esos procesos.
Cientos de miles de hombres, soldados, médicos y técnicos, así como armas y abastecimiento fueron enviados al continente negro.
Reunidos en el Palacio de las Convenciones, los invitados a la ceremonia contaron también con la presencia de diplomáticos africanos acreditados en la isla.
’’Nunca antes un país había hecho tanto por la humanidad, nunca país alguno ha recibido tan poco por su sacrificio’’, dijo la embajadora de Sudáfrica, Thenjiwe Ethel Mtintso, quien recordó que La Habana no exigió jamás ninguna clase de compensación política o económica por su solidaridad.
’’Nos mantendremos al lado de Cuba a pesar de lo que algunos (países) amigos puedan querer’’, agregó la diplomática al agradecer a nombre de su gobierno el apoyo de La Habana para derrotar al racismo.
Por su parte, Claudia Grace Uushona, la embajadora de Namibia —ella misma una joven víctima de la guerra y que recibió oportunidad de estudiar en Cuba— expresó visiblemente emocionada su opinión: ’’Hoy somos un país libre y soberano gracias al pueblo cubano’’.
’’El bloqueo (contra La Habana) será desmantelado como fue derrotado el apartheid’’, manifestó Uushona.
Además de este acto central en el cual participó Castro, a lo largo y ancho de la isla se realizaron homenajes por el Día de las FAR, en memoria del arribo del mandatario y un puñado de hombres hace 49 años a las costas cubanas procedentes de México con la intención de derrocar al dictador Fulgencio Batista.
Lograron su objetivo en enero de 1959 y en febrero de ese año Raúl Castro, hermano del presidente, fue nombrado jefe de las Fuerzas Armadas sustituyendo al antiguo organismo militar. Actualmente es Ministro de Defensa.
Algunos hechos históricos marcaron la vida de los uniformados cubanos a lo largo de estos años: la invasión contrarrevolucionaria en Playa Girón y la crisis de los misiles, que en plena Guerra Fría estuvo a punto de desencadenar una guerra nuclear entre la Unión Soviética y Estados Unidos.
Los uniformados isleños cumplieron misiones en Argelia, Siria, Angola, Etiopía y Nicaragua durante el periodo de gobierno sandinista.
Cifras oficiales estiman que 400.000 militares y reserviaron operaciones ’’internacionalistas’’. Unos 2.000 cubanos perdieron la vida en el extranjero en guerras de liberación.
A partir de 1963 se incluyó oficialmente a los militares en las filas de Partido Comunista y, a diferencia de otras naciones, se les permite votar y participar de la vida política.
