QUITO.- La ecuatoriana María Esther Heredia Lecaro viuda de Capovilla, de 116 años y considerada la persona más anciana del mundo por el libro records Guinness, es una mujer que de joven consumió leche de burra, tocó el piano y jamás ha fumado, relató este viernes a la AFP su hija de 80 años.
La anciana convive con Hilda Capovilla, la tercera de sus cinco hijos, en una casa del puerto de Guayaquil (275 km al suroeste de Quito), donde recibió la noticia de su designación.
"Ahora está almorzando con sus propias manos, maneja los cubiertos a las mil maravillas y no depende de nadie", dijo Capovilla, una de las descendientes de la unión de la mujer longeva con un ingeniero militar austríaco, fallecido en 1949.
"Mi madre no sufre de nada, ni de colesterol, ni triglicéridos y tampoco tiene alteraciones de la presión", agregó la anciana hija.
Según Capovilla la viuda, aparte de llevar una sana dieta, consumió en los años mozos leche de burra en la hacienda de la familia, ubicada en el litoral.
A Heredia Lecaro le sobreviven tres de sus cinco hijos, once nietos, 20 bisnietos y dos tataranietos.
Al incluirla formalmente en los registros como la persona más anciana del mundo, el libro Guinness retomó las palabras de la viuda según las cuales su prolongada vida se "debe a un estilo sobrio de vida" que excluyó siempre el tábaco y el alcohol.
Además "tocaba el piano y era considerada una persona delicada, por lo que siempre tuvo una vida sana y nunca fumó", corroboró su hija.
De acuerdo con su familia, la mujer se casó con el capitán de fragata Antonio Capovilla Oliva, un austriaco de origen italiano nacido en 1864 y que vivió varios años en Chile antes de instalarse en Ecuador, donde se nacionalizó.
Según Hilda Capovilla, su padre era un ingeniero naval que inventó un mecanismo para lanzar torpedos conocido como electropercutor, una bomba aérea y una mina mecánica submarina. En 1910 fue contratado por la Armada ecuatoriana y murió 39 años después en Guayaquil.
Los allegados de la mujer aseguran que la mujer cumplió 116 años el 14 de septiembre último, aunque la edad difiere de los archivos del Registro Civil de Ecuador en los que figura con 11 años menos, según verificó la AFP.
"El dato es erróneo. Mi suegra nació en 1889 y así consta en los documentos que enviamos a Guinnes records que, tras evaluarlo, certificó su edad", agregó por su parte María de Capovilla, la esposa del hijo menor de la longeva.
El Guinness dijo que la ecuatoriana desplazó como la mujer más vieja del planeta a la estadounidense Elizabeth Bolden, de 115 años. El hombre más anciano del mundo es un puertorriqueño llamado Emiliano Mercado Del Toro, que tenía 114 años en enero.
En el sur de Ecuador, cerca de la frontera con Perú, está localizada la población de Vilcabamba, donde habitan varios longevos que alcanzan edades centenarias.