JERUSALÉN.- Decenas de milicianos palestinos salieron a las calles de la Franja de Gaza y efectuaron disparos al aire en señal de alegría por el estado de salud del Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, quien hoy fue ingresado en un hospital de Jerusalén tras sufrir un leve infarto cerebral.
"Dios ha respondido a nuestras oraciones y no nos ha defraudado", dijo un miliciano de los Comités Populares de la Resistencia a la edición electrónica del diario "Yediot Ajaronot".
Por su parte, Mushir al Masri, vocero de la organización fundamentalista Hamas, calificó al jefe de Gobierno israelí como "uno de los peores criminales del mundo".
Al Masri enfatizó: "Sea alabado el Señor", cuando se conoció la internación de Sharon en el Hospital Hadassah de Jerusalén.
En declaraciones al sitio de internet Maariv, el vocero de Hamas especuló que la crisis de salud de Sharon es consecuencia de la "crisis política" de su proyecto de gobierno, que "no pudo ser realizado".
La noticia también generó satisfacción entre los militantes del movimiento ultraderechista israelí Hach, que a través de sus voceros proclamaron: "Rogamos a Dios que nos libere de ése (Sharon)".
