BERLÍN.- La canciller alemana, Angela Merkel, quiere demostrar a sus ciudadanos que además de artes políticas tiene conocimientos culinarios y puede competir con cualquiera en la preparación del tradicional ganso navideño.
Merkel utilizó la plataforma que proporciona el popular diario "Bild" para aconsejar a los germanos que lo primero a tener en cuenta si se quiere un excelente resultado en la mesa es el ganso, que no debe tener mucha grasa y, de ser posible, debe haber crecido en libertad.
Para un "ganso a la Merkel" hay que lavarlo, salarlo, rellenarlo con artemisa, manzana y coserlo. Antes de ponerlo en el horno, se sumerge en agua hirviendo para eliminar la grasa.
La canciller coloca luego el ganso en un recipiente con casi un centímetro de agua y salsa de asado y lo deja en el horno, a entre 150 y 170 grados, por cerca de cuatro horas.
En ese tiempo, Merkel aconseja dar la vuelta al ganso varias veces y regarlo con el agua y la grasa. Y cuando está listo, y esto es muy importante, hay que regarlo con agua salada muy fría, pues así adquirirá la piel una consistencia crujiente.
La canciller recomienda reducir la temperatura del horno y mantenerlo unos veinte minutos más, hasta lograr un dorado uniforme.
"Finalmente, se saca y se trincha, mejor si es con el instrumental que se utiliza para el pato, pues el ganso es duro", aconseja.
Y para acompañarlo en la mesa, dice Merkel, lo mejor es con la salsa del asado, col verde y papas. "Guten appetit".