AMMAN.- Los abogados de Saddam Hussein pidieron a su corte de Bagdad una investigación independiente sobre los reclamos del líder iraquí derrocado de que fue torturado por sus captores estadounidenses.
El abogado jefe de la defensa Khalil Dulaimi dijo hoy que Saddam espera que el aumento del abuso psicológico y físico le impida defenderse correctamente en la corte.
Saddam está siendo sometido a juicio por su conexión con la matanza de 148 personas en un pueblo al norte de Bagdad en los años ochenta. Dijo a una audiencia de la corte el jueves que había sido golpeado por los estadounidenses, pero no mostró ninguna marca a la corte.
"Llevé una queja a la corte para investigar el crimen contra mi cliente y la tortura contra él durante y después de su arresto", dijo Dulaimi en una entrevista en Amman.
"Pedimos un equipo médico independiente que examine al Presidente y los moretones causados en su cuerpo que todavía son visibles", dijo Dulaimi sin explayarse.
La Casa Blanca ya rechazó el reclamo de Saddam como absurdo. El juicio fue cancelado hasta el 24 de enero.
Saddam todavía espera lo peor, dijo Dulaimi.
"El Presidente cree que van a intensificar la tortura física y psicológica, desde maltratos hasta abuso verbal y otra tácticas, para agotarlo", dijo.
"Quieren debilitar su rol en la corte para que no pueda usar su derecho natural en su defensa", agregó.
Cuestionamientos por un juicio justo
Saddam usó su alto perfil en una corte fortificada en Bagdad para atacar a la política de Estados Unidos y apelar al nacionalismo iraquí.
Su actuación desató un malestar de los críticos que dicen que está usando el juicio como una plataforma política para robarse el espectáculo de los testigos que describieron las golpizas y torturas que sufrieron durante su régimen.
También se trata de una corte nerviosa que recurre frecuentemente a cortar el sonido y a dar la imagen de modelo para la justicia, cada vez que Saddam parecía revelar algo que pudiera influenciar a la opinión pública, dijo Dulaimi.
Los abogados, por su parte, también aumentaron las interrupciones en la corte para callar a Saddam, dijo Dulaimi.
"Cada vez que el Presidente quiere decir algo importante lo cortan (...) esto es una censura total y un intento de evitar que se divulgue su voz", dijo Dulaimi.
La corte también restringe el acceso directo de Saddam con su equipo de defensa antes de cada nueva audiencia.
Como parte de la creciente presión, Saddam estaba siendo trasladado a una pequeña celda sin ventanas unos días antes de cada aparición ante la corte.
"El Presidente solía pasar varias horas en la prisión de la corte en las primeras horas del juicio, pero ahora son varios días y más horas que lo privan del sueño", dijo Dulaimi.
