TEHERÁN.- El jefe de la Organización Iraní de la Energía Atómica, Gholamreza Aghazedeh, aseguró hoy que las instalaciones iraníes de enriquecimiento de uranio están ocultas bajo tierra y no pueden resultar dañadas en caso de un ataque, informó la agencia ISNA.
"Las instalaciones de enriquecimiento, sobre todo (la fábrica de) Natanz, se encuentran en las profundidades de la tierra y ninguna ofensiva puede dañarlas", declaró el responsable iraní, según ISNA.
En los últimos meses varios responsables israelíes mencionaron un posible ataque contra las instalaciones nucleares iraníes para evitar que Irán desarrolle su programa nuclear.
Israel y Estados Unidos acusan a Irán de intentar dotarse del arma nuclear, con la coartada de su programa nuclear civil.
"Las materias primas de la fábrica de conversión de Ispahán se encuentran también en túneles subterráneos", añadió el responsable iraní, afirmando que "según las convenciones internacionales toda acción contra las instalaciones nucleares iraníes está prohibida".
"Hemos obtenido nuestra tecnología nuclear al mismo tiempo que sufríamos sanciones, y no de los occidentales. En consecuencia, las (posibles) sanciones no tendrán ningún efecto en nuestras actividades nucleares", advirtió.
La Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) adoptó a principio de febrero una resolución pidiendo a Irán que suspenda todas sus actividades nucleares sensibles e informando al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas del expediente nuclear iraní, lo que podría conllevar sanciones contra Irán.