CHICAGO.- Ocho empleados de una carnicería industrial de Lincoln (Nebraska, centro) compartieron el miércoles el mayor premio en la historia de la lotería estadounidense, una suma récord de 365 millones de dólares.
Los ocho ganadores, que habían guardado silencio sobre su identidad durante algunos días, optaron por un cobro total inmediato, en vez de recibir una renta anual durante treinta años, por lo que compartirán una suma menor, de 177,3 millones de dólares.
Cada uno recibió un cheque de 22,1 millones de dólares, que quedará en 15,5 millones luego de los descuentos impositivos estatales y federales.
Entre los ocho ganadores figuran dos refugiados vietnamitas, instalados en Estados Unidos desde hace 16 años, de 34 y 56 años de edad, y un mecánico congolés de 26 años.
En una animada conferencia de prensa sólo interrumpida por aplausos, risas y llantos de bebé, los ganadores trataron de explicar qué se siente convertirse en millonarios de la noche a la mañana.
"Todavía pensamos que nos vamos a despertar de un sueño", dijo Chasity Rutjens, de 29 años, la única mujer del grupo.
El refugiado congolés, Alain Maboussou, declaró que con este dinero podrá finalmente reanudar sus estudios para obtener un título en administración y fundar su propia empresa.
"Hasta ahora fue un esfuerzo volver a estudiar con semanas de trabajo de 70 a 75 horas", dijo.
La mayoría de los otros ganadores indicó que pensaba dejar su empleo y gozar de su fortuna caída del cielo.