BOGOTÁ.— Con la entrega de armas e, incluso, un avión, un grupo de 70 guerrilleros de las FARC se desmovilizó el martes en una zona al centro sur del país, en medio de numerosos ataques rebeldes en los últimos cinco días.
El anuncio fue hecho por el presidente Alvaro Uribe durante la firma de un acuerdo con empresarios españoles.
"Acaba de desmovilizarse totalmente la compañía La Gaitana de las FARC con sus 70 integrantes. Sus comandantes han entregado: 63 armas y un avión aerocomander", precisó Uribe.
Agregó que la aeronave hacía parte de la "logística para la toma terrorista del poder".
El aparato fue adquirido por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) antes de finalizar la zona de distensión, una región que estuvo bajo el poder de la guerrilla por casi tres años.
Las negociaciones entre este grupo armado ilegal y el presidente Andrés Pastrana (1998-2002) se rompieron abruptamente en febrero de 2002 tras el secuestro de un avión y la retención de un senador de la república.
El comisionado presidencial para la paz, Luis Carlos Restrepo, aseguró a reporteros que la cuadrilla estaba comandada por Julián Ríos y Raúl Agudelo, nombres supuestos, quienes junto con sus hombres de acogerán a la ley de justicia y paz que también fue aplicada a los paramilitares desmovilizados.
Restrepo precisó a la AP que no tenía "información militar" de los insurrectos que operaban en un área del norte del departamento del Tolima, al centro del país, donde la mayor actividad económica está centrada en el cultivo de arroz y la ganadería.
Se indagó por la historia delincuencial de la cuadrilla guerrillera en la zona, pero no se logró obtener nada concreto en ninguna dependencia estatal ni periodística.
En su discurso a los guerrilleros, Restrepo indicó que el reingreso a la civilidad de los desmovilizados "permite que renazca la esperanza y nos permite también reiterarle a este grupo ilegal que los caminos del dialogo y de la paz están abiertos".
Las FARC a comienzo de 2006 rechazaron una propuesta de tres países europeos, Suiza, Francia y España, en la que plantearon el despeje de un área de 180 kilómetros cuadrados, al suroeste del país, para que allí pudieran negociar las partes.
Alegaron los guerrilleros que no emprenderían ninguna negociación con Uribe porque él había decidido desde el inicio de su mandato a doblegarlos militarmente.
Esta insurgencia es la más numerosa y antigua del país con más de cuatro décadas de lucha armada ilegal con pretensiones de hacerse del poder.
Las FARC usan el secuestro, la extorsión y el narcotráfico como fuentes de finaciamiento.