BERLÍN.- Cinco meses después de haber sido elegido presidente del Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), la nueva estrella ascendente, Matthias Platzeck, tuvo que renunciar por razones de salud, abriendo un nuevo interregno mientras el partido está en pleno descalabro, según las encuestas.
Matthias Platzeck anunció oficialmente su dimisión este lunes por razones de salud, apenas cinco meses después de haber sido nombrado en ese cargo.
Se trata de "la decisión más difícil de mi vida hasta el presente", afirmó Platzeck durante una conferencia de prensa en la sede del partido en Berlín, en la que señaló que actuaba así siguiendo el consejo de sus médicos.
Fuentes próximas al SPD indicaron el lunes que Matthias Platzeck, de 52 años, se disponía a renunciar. Platzeck fue hospitalizado el 29 de marzo por problemas auditivos relacionados con el estrés sufrido en las últimas semanas, y finalmente el pasado miércoles salió de la clínica.
Platzeck afirmó que había experimentado desde comienzos de año varias afecciones de salud. Fue víctima de una crisis nerviosa y tuvo problemas circulatorios.
El actual vicepresidente, Kurt Beck, se hizo cargo provisionalmente de los asuntos al frente del partido hasta que sea elegido el nuevo timonel del SPD.
Beck fue reelegido el pasado 26 de marzo como primer ministro del estado federado de Renania-Palatinado.
Elegido el 15 de noviembre a la presidencia del SPD, Matthias Platzeck reconoció este lunes haber "sobreestimado sus fuerzas" en ese momento al decidir acumular sus funciones al frente del SPD con las de la jefatura del gobierno regional de Brandemburgo (este) y las de la presidencia del grupo parlamentario socialdemócrata regional.
Matthias Platzeck, quien ocupa el cargo de primer ministro del gobierno del estado regional de Brandemburgo desde junio de 2002, fue designado triunfalmente al frente del SPD, tras la sorpresiva dimisión del entonces presidente, Franz Muentefering.
Platzeck fue elegido con el 99,4% de los votos al frente de un partido en crisis, sacudido por agitaciones internas y la partida del ex canciller Gerhard Schroeder, luego de que el partido fuera derrotado por poco margen por los democristianos en las elecciones legislativas del 18 de septiembre pasado.
Su llegada a la jefatura del partido político más antiguo de Alemania estuvo marcada por un retorno a la moderación, que el mismo Platzeck encarna, al igual que la canciller Angela Merkel, ambos integrantes de una nueva generación de responsables políticos originarios de la extinta República Democrática Alemana (RDA).
Matthias Platzeck apoyó el movimiento disidente de otoño de 1989 y emprendió su carrera política poco después de la caída del Muro de Berlín.
