JERUSALÉN.- Efectivos del Ejército israelí volvieron a penetrar hoy en territorio de la franja autónoma palestina de Gaza en busca de explosivos, informaron fuentes militares.
La primera incursión, unos cien metros, se registró ayer después de que soldados de guardia en la zona de Kisufim mataran a dos milicianos palestinos cuando, al parecer, se disponían a infiltrarse en territorio de Israel.
El Ejército israelí se replegó de la franja de Gaza el pasado 12 de septiembre tras el desalojo y desmantelamiento de veintiún asentamientos judíos, después de 38 años de ocupación.
El repliegue militar permitió a los activistas de la resistencia palestina instalarse en terrenos deshabitados junto al límite de Gaza con Israel para atacar desde allí localidades de este país con sus cohetes Al Kasam, que tienen un alcance de unos 10 kilómetros.
Artilleros israelíes han disparado más de 1.000 proyectiles -incluso la Fuerza Naval desde el mar Mediterráneo- contra esa zona y esta semana uno de ellos causó la muerte de una niña de 12 años en el pueblo palestino de Beit Lahie, y herido a doce familiares de la menor.
Las autoridades militares israelíes se muestran impotentes para impedir el disparo de los Al Kasam pero los jefes, empezando por el de las Fuerzas Armadas, se niegan a una invasión de Gaza por tierra.
Antes del repliegue, se queja la población de unas 38 localidades expuestas a esos cohetes, los palestinos no podían dispararlos.
Esta mañana, informa la prensa local, seguían los disparos de la artillería horas antes de comenzar en Israel la jornada del descanso sabático, sin que se informara de víctimas.
El subcomandante en jefe de las Fuerzas Armadas, general Moshé Kaplinsky, dijo al diario Yediot Aharonot que los ataques palestinos "nos obligan a disparar contra zonas pobladas (del norte de Gaza) pero no lo hacemos contra concentraciones civiles, aunque a veces pueden producirse errores", como el ocurrido en Beit Lahie.
Kaplinsky comentó al rotativo, que publica hoy sus declaraciones, que "dentro de unos meses pondremos en práctica un nuevo proyecto contra los cohetes Al Kasam", y hasta entonces, recomienda "tener paciencia" a la población que se siente amenazada.
