WASHINGTON.- Un juez californiano reconoció un resarcimiento de 500.000 dólares a una mujer de 53 años que se consideró despedida tras ser golpeada en el trasero delante de colegas de trabajo.
El juez reconoció que Janet Orlando fue víctima de molestia y agresión sexual cuando fue obligada a dejarse tocar el trasero, con una raqueta de madera, mientras trabajaba para la 'Alarm One', una compañía de alarmas antirrobo de Fresno, California.
Esta práctica comenzó cuando los responsables de la compañía decidieron crear competiciones entre los equipos de revendedores: los que perdían debían sufrir embarazosas penitencias como recibir una torta contra su rostro o ser golpeados en sus traseros.
Esta iniciativa no fue del agrado de Janet Orlando quien, luego de recibir en 2004 unos golpes en su trasero, se consideró despedida e inició una acción judicial contra la empresa pidiendo 1,2 millones de dólares por la humillación sufrida.
El juez admitió que Orlando sufrió estrés emotivo y sufrimiento físico como consecuencia de los golpes en su trasero, y condenó a la empresa a pagarle 500.000 dólares.
