HEBRÓN, Cisjordania.- El nuevo Primer Ministro de Israel prometió combatir cualquier asentamiento ilegal improvisado en Cisjordania, luego de que la policía desalojara a colonos judíos de una vivienda palestina el domingo.
Policías israelíes desalojaron a decenas de judíos que invadieron una residencia palestina en la ciudad cisjordana de Hebrón, en una prueba para el nuevo gobierno israelí y sus planes de movilizar a numerosos colonos.
El Premier Ehud Olmert, quien ganó las elecciones bajo la promesa de redefinir las fronteras de Israel para el año 2010, aseguró que los incidentes del domingo en Hebrón son sólo el comienzo.
Según su plan, hay que controlar docenas de asentamientos construídos en las colinas de Cisjordania sin autorización del gobierno en un intento por obstaculizar la creación del estado palestino.
También el domingo el gobierno comenzó su programa para facilitar el movimiento de trabajadores palestinos, que no han podido ingresar a Israel los últimos dos meses. Amir Peretz, recién nombrado ministro de defensa, afirmó que en la primera etapa 12.000 trabajadores podrán acceder a través de Cisjordania.
Ante el desalojo del domingo, los colonos respondieron con una violencia moderada. La operación contrastó notablemente con el desalojo violento de una pequeña zona en Cisjordania en febrero, cuando más de 200 policías y manifestantes adolescentes resultaron heridos.
El primer ministro Ehud Olmert fue duramente criticado por el manejo de aquella operación, cuando encabezaba un gobierno interino.
El domingo la policía ingresó en el inmueble después de cortar una puerta metálica con una sierra mecánica. Los agentes instaron a los colonos —varios de los cuales tenían hijos pequeños— a salir en forma pacífica, y algunos accedieron. Pero otros debieron ser sacados a rastras.
Colonos judíos fuera del edificio trataron de ingresar por la fuerza inmediatamente después de que la policía, con equipo antimotines, cortó la puerta. Sin embargo, los agentes sacaron a los manifestantes, algunos de los cuales fueron golpeados.
En total, tres familias y 27 simpatizantes jóvenes del área de Hebrón fueron sacados del inmueble, dijo el portavoz policial Mickey Rosenfeld. Diecinueve agentes de seguridad resultaron heridos y 17 colonos fueron detenidos, añadió la fuente.
Ni Rosenfeld ni los servicios de rescate dieron de inmediato un recuento de los colonos heridos, pero la radio del Ejército de Israel dijo que siete colonos sufrieron lesiones leves.
En Hebrón, una ciudad sagrada tanto para judíos como para musulmanes, viven unos 160.000 palestinos y unos 500 judíos ultranacionalistas, en enclaves fortificados.
