MÉXICO.- Los cuerpos de once personas, cuatro de ellas policías, fueron hallados en distintas zonas del estado sureño mexicano de Guerrero, víctimas aparentemente de una ola de sangrientas venganzas del narcotráfico.
Al menos siete de los cuerpos que presentaban huellas de tortura fueron encontrados en la zona turística del puerto de Acapulco, en la costa del Pacífico.
La policía municipal indicó que cuatro de los cadáveres de sexo masculino fueron hallados hoy en el barrio Balcones al Mar, rumbo a la popular playa Pie de la Cuesta.
Las cuatro cuerpos, de personas entre 25 y 30 años cuyas identidades no fueron establecidas, presentaban disparos de arma de fuego, y estaban atados con vendas blancas de pies y manos, con los ojos cubiertos.
En la Avenida Costera Vieja, a 50 metros del hotel Aladino, fueron hallados los cuerpos de otras dos personas, también de identidad desconocida, que aparentemente fueron ahorcadas con un cable de electricidad y también atados y amordazados.
Más tarde, en la ruta de Acapulco hacia el vecino estado de Oaxaca, se halló el cuerpo de otra persona dentro de una bolsa de plástico negro.
En tanto, los cadáveres de cuatro policías que habían sido secuestrados el miércoles en el estado de Guerrero, sur de México, fueron hallados en el poblado de Apizaco.
Se trata de tres agentes de la denominada Policía Investigadora Ministerial, un organismo civil perteneciente a la fiscalía del estado, y un perito de la Procuraduría de Justicia de Guerrero.
Guerrero se convirtió en los últimos meses en escenario cada vez más frecuente de los "ajustes de cuentas" de cárteles del narcotráfico, pero también operan varios grupos guerrilleros.
