SYDNEY.- Grupos de jóvenes violentos volvieron a sembrar el caos e incendiaron una veintena de casas en Dili la pasada madrugada, después de que partidarios del dimisionario primer ministro, Mari Alkatiri, entraran en la capital para manifestarse a su favor.
Según testigos citados por la agencia australiana AAP, los autores de los disturbios eran personas procedentes del oeste del país y algunas de ellas pasaron con sus coches por delante de los centros de refugio para desplazados y les gritaron "iros de Dili".
Una calma relativa se mantiene hoy en la capital timorense, indicó la fuente, con el temor de que se produzcan enfrentamientos entre los ciudadanos contrarios a Alkatiri y los partidarios del ex primer ministro, que presentó su dimisión el lunes para acabar con la larga crisis política y la ola de violencia que afecta el país.
Los soldados extranjeros colocaron ayer vallas en las carreteras para mantener a los manifestantes fuera del centro de la capital, donde la vida empezaba a recuperar parte de la normalidad perdida hace semanas.