MÉXICO.- La Justicia mexicana declaró en "libertad absoluta" al ex Presidente Luis Echeverría (1970-76), quien estaba bajo arresto domiciliario acusado de genocidio, al considerar que prescribió la acción penal en su contra, dijo hoy la defensa.
El abogado de Echeverría, Juan Velázquez, señaló a EFE que funcionarios del Juzgado 15 Penal se presentaron en el domicilio del octogenario ex jefe de Estado "para notificarle sobre el auto de libertad y la prescripción del delito de genocidio".
"Se ha suspendido el arresto domiciliario del ex Presidente, por lo que deben retirarse los policías que custodian su vivienda" desde el pasado 30 de junio, cuando la justicia ordenó la medida, detalló Velázquez.
Fiscales que investigan la "guerra sucia" en México acusaron a Echeverría, de 84 años, de genocidio por la matanza de estudiantes ocurrida en la Plaza de las Tres Culturas de Ciudad de México el 2 de octubre de 1968, cuando él desempeñaba el cargo de secretario (ministro) de Gobernación (Interior).
La ley mexicana contempla que los inculpados de avanzada edad deben ser procesados bajo arresto domiciliario.
Velázquez admitió que la suspensión del arresto domiciliario y la prescripción de la acción penal pueden ser apeladas por la Fiscalía Especial que investiga la "guerra sucia" que afectó a México entre finales de la década del 60 y comienzos de la del 80.
Ese organismo investigador depende de la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) que, a su vez, forma parte del Poder Ejecutivo y no del Judicial.
Hasta ahora se ignora la reacción de los fiscales a la decisión del Juzgado 15 Penal.
El ex Presidente, quien pertenece al opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), ha negado que lo ocurrido en la Plaza de las Tres Culturas el 2 de octubre de 1968 haya sido un genocidio y cree que, en todo caso, este presunto delito ya había prescrito.
Los hechos de la Plaza de las Tres Culturas, en el sector capitalino de Tlatelolco, dejaron un saldo de 39 muertos, según las autoridades, pero fuentes independientes aseguran que las víctimas fatales fueron entre 200 y 300.
