WASHINGTON.- El Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, firmó hoy una ley que obliga a aquellos condenados por abusos a menores a registrarse en una base de datos en internet para dar cuenta de su paradero actual.
"Nuestra nación llora con cada familia que ha sufrido el insoportable dolor de un niño que ha sido secuestrado o abusado. Esta ley da un paso adelante en los esfuerzos de este país por proteger a quienes no pueden protegerse por sí solos", dijo Bush en la ceremonia de aprobación de la ley en la Casa Blanca.
La norma también impone una pena obligatoria de un mínimo de 30 años por violar a un menor, una pena obligatoria de 10 años por delitos relacionados con el tráfico sexual y por coaccionar a menores a la prostitución, y aumenta el castigo para abusadores que viajan de un estado a otro.
El Centro Nacional de Niños Desaparecidos y Explotados calcula que hay más de 560.000 delincuentes sexuales en Estados Unidos registrados, pero que otros 100.000 no lo están o no han actualizado sus datos.
La nueva ley creará un archivo de delincuentes sexuales abierto al público, que cubra las deficiencias en los actuales sistemas de registro.
El infractor que no actualice su información en el estado en que vive, trabaja o estudia, podrá ser juzgado por un delito grave y condenado a más de diez años de cárcel.
La nueva ley, que también contempla la creación de 200 nuevos puestos de fiscales federales y 45 nuevos peritos en tecnología, recibe el nombre de Adam Walsh, como el hijo de seis años del popular presentador de televisión y activista de la causa, John Walsh, quien fue secuestrado y asesinado hace 25 años.
"Estas mejoras ayudarán a evitar que los delincuentes sexuales puedan escaparse del control con un cambio de un estado a otro", dijo Bush.
