MÉXICO.- Andrés Manuel López Obrador, a quien los resultados oficiales colocaron en segundo lugar en los comicios presidenciales mexicanos, se aferra a los múltiples errores matemáticos que presentan las actas electorales para pedir un recuento de todos los votos.
"Tenía al principio (...) indicios de que habíamos ganado, que se había cometido un fraude. Ahora tengo la certeza absoluta de que triunfamos, y tenemos todos los elementos", señala el ex alcalde de la ciudad de México.
Entre otras denuncias, el aspirante presidencial de la coalición de izquierda Por el Bien de Todos asegura que la mayor parte de las actas de escrutinio y cómputo contienen errores aritméticos y que, si se vuelven a contar los votos, éstos lo darán sin duda como ganador.
Las pruebas
Desde la semana pasada, López Obrador ha publicado en su página de Internet las que considera pruebas de su denuncia: las copias de las actas con dichos errores. En total son 72.197 (sobre un universo de poco más de 130.000).
En cada acta, además del número de votos de cada candidato, de los aspirantes no registrados y los nulos, vienen otras cinco cifras: la de electores inscritos en el listado nominal, las boletas con que contaba cada casilla el día de la votación, las que sobraron, las que se encontraron en la urna y el número de votantes.
El número de votantes y el de boletas en la urna debería coincidir y si se suma el de boletas sobrantes tendría que arrojar una cifra igual a la de boletas disponibles.
Sin embargo, no siempre sucede así, afirma la campaña de López Obrador, ya que en ocasiones, habría más votos que votantes, o menos; o no coincide el número de votantes que acudieron a sufragar con el de votos encontrados en las urnas.
La respuesta del Instituto Electoral
Por ello, la formación de izquiera pidió que en el cómputo distrital, tres días después de las elecciones, se volviesen a contar los votos.
El Instituto Federal Electoral (IFE) accedió a revisar sólo 2.873 casillas que consideró con inconsistencias, basándose en la ley electoral que estipula que deben abrirse los paquetes cuando existan errores evidentes.
Según López Obrador, la autoridad electoral debió abrir todos los paquetes que su coalición señalaba con errores.
Por su parte, el presidente del IFE, Luis Carlos Ugalde, indicó que los errores "se distribuyen aleatoriamente".
A veces favorecerán a un candidato y otras veces a otro, pero no puede haber un sesgo en detrimento de uno u otro porque los funcionarios de casilla son ciudadanos elegidos al azar, explicó.
