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CASTEL GANDOLFO, Italia.- El Papa Benedicto XVI pidió hoy por los afectados por la violencia en Medio Oriente y para que se logre "la victoria de la paz" sobre el odio, durante una misa con motivo de la festividad de la Asunción celebrada en Castel Gandolfo, al sur de Roma.
"Recemos para que María, Reina de la Paz, ayude a la victoria de la paz hoy", exhortó el Pontífice durante la ceremonia, que tuvo lugar en la pequeña parroquia de San Tommaso de Castel Gandolfo, donde transcurre sus vacaciones estivales.
Joseph Ratzinger se mostró convencido de que "al final vencerá el amor y no el odio, vencerá la paz", e insistió en que es necesario "estar de parte del bien" para que la humanidad "pueda conocer un tiempo de paz".
En la misa, el Papa y los fieles pidieron "por los pueblos de Oriente Medio que están todavía desgarrados por la guerra", y para que los gobernantes "no olviden nunca que Dios elevó a los humildes y arruinó imperios".
Además se refirió a "la querida nación de Sri Lanka" y advirtió de que está "amenazada por el deterioro del conflicto étnico", en referencia al recrudecimiento de la violencia que esta semana causó la muerte de medio centenar de niñas en una escuela, según denunció la guerrilla tamil.
El Pontífice aludió también al conflicto de Irak, "donde la espantosa y cotidiana estela de sangre aleja la perspectiva de la reconciliación y la reconstrucción".
En este sentido, pidió para que todos en estos lugares prevalezca "la comprensión, voluntad de acuerdo y deseo de concordia".
