BERLÍN.- La alarma provocada por el hallazgo de una maleta sospechosa en un tren regional en la estación central de Coblenza (oeste del país) resultó falsa, informó la policía local.
La policía de Coblenza desalojó este mediodía la estación y acordonó esta tarde la zona ante el temor de que la maleta sospechosa pudiera contener una bomba.
Para poder facilitar el trabajo de los especialistas en explosivos, la policía desacopló el vagón del tren y lo llevó a una vía secundaria de la estación de mercancías cercana.
El propietario de la maleta, un brasileño de 23 años, colocó la maleta en el tren, fue a hacer unas fotos y estuvo ausente del vagón unos minutos, lo que provocó la alarma.
Tras ser interrogado por la policía, el brasileño pudo seguir su viaje, precisó la policía de Coblenza en un comunicado.
La falsa alarma coincide con la detención hoy en la estación central de Kiel (norte de Alemania) de uno de los dos sospechosos de haber planeado los atentados fallidos del pasado 31 de julio en dos trenes regionales en Dússeldorf y Coblenza.
El detenido está siendo interrogado por la policía y mañana, domingo, deberá comparecer ante el juez instructor.
La fiscal general ofrecerá esta tarde en Karlsruhe una rueda de prensa en la que dará más detalles sobre la detención del sospechoso.
Según informaciones de la edición "on-line" de la revista Focus el detenido sería un estudiante libanés que estudia en Kiel y vive en una residencia de estudiantes.
El libanés detenido sería, según este semanario, "miembro de una red islamista, que no ha sido hasta ahora desenmascarada".
De momento, sin embargo, ni la policía ni la fiscalía federal han desvelado datos sobre la identidad y la nacionalidad del detenido.
La detención se produjo un día después de que la Oficina federal de Investigación Criminal (BKA) distribuyera las imágenes de vídeo grabadas por las cámaras de vigilancia de la estación central de Colonia el pasado 31 de julio.
En ellas se pueden ver a los dos sospechosos de haber colocado las bombas en dos trenes regionales, dos hombres con edades comprendidas entre los 20 y 30 años que transportan maletas con ruedas.
Los artefactos finalmente no explotaron por un error de manipulación por lo que se pudo evitar una masacre.
La policía alemana ofreció el viernes una recompensa de 50.000 euros a quien aporte pistas que puedan llevar a la detención de los dos sospechosos.
