LIMA.- La ex primera dama de Perú, Eliane Karp, acaparó este sábado las portadas de la prensa peruana por un caso insólito: un pedido de la justicia a la Interpol para ubicarla, de cara a declarar en un escándalo de presunta corrupción que envuelve al partido de su esposo Alejandro Toledo.
La solicitud fue presentada por la jueza Carolina Lizárraga de un tribunal especial anticorrupción, que desde hace más de un año quiere interrogar a Karp como testigo en el sonado proceso de falsificación de firmas del partido de Toledo País Posible, que luego cambió a Perú Posible.
"Jueza pide a Interpol que la ubique", tituló el diario "La República" que ilustró su portada con una foto de Karp, y que recuerda que debe declarar en el proceso contra su cuñada Margarita Toledo -bajo arresto domiciliario- por delitos contra la fe pública en agravio del Estado.
"Se busca" puso en su portada a modo de aviso policial el periódico La Primera, al igual que La Razón ("La buscan"), en tanto que "El Comercio" y "Perú21" le dedicaron un pequeño espacio en sus primeras planas.
El caso tiene connotaciones políticas que podrían salpicar al ex Presidente Toledo, quien no está comprendido en la investigación, que también incluye a otras 34 personas por la presunta falsificación de firmas que permitió en 1998 la inscripción electoral de su partido.
Toledo ha desmentido las versiones de la prensa local, de que su esposa no piensa retornar a Perú porque está evadiendo a la justicia, y ha denunciado una campaña contra su cónyuge.
"La justicia puede tener la seguridad que para cualquier investigación que se haga, nosotros estaremos en nuestro país", declaró Toledo hace una semana antes de partir solo a Washington y París.
En tanto, el paradero de Karp es un misterio desde que dejó Perú, dos semanas antes del fin del gobierno de Toledo, el 28 de julio. Ella misma hizo público que partía a Francia para visitar a la hija común del matrimonio.
Su viaje desató rumores -que no han cesado-- de un adiós "definitivo" al país, en medio del cerco judicial para que ofrezca su testimonio en un caso que saltó al primer plano a mitad de la gestión de Toledo (2001-2006). Incluso medios de prensa aseguran haber seguido su pista hasta Israel.