LA PAZ.- Los transportistas de La Paz convocaron este lunes a una "paro indefinido" tras una jornada de protesta que mantuvo bloqueadas las calles de la sede del gobierno de Bolivia, como una medida de rechazo a los cambios viales anunciados por la alcaldía.
Los dirigentes paceños convocaron al final de esta jornada a un "paro indefinido", según difundió la radio Erbol, al informar la resolución adoptada en el "ampliado" (reunión) de los conductores, quienes rechazaron cualquier vinculación con intereses "políticos".
"Es un paro indefinido", anticipó Franklin Durán, en breves declaraciones a la prensa.
Mientras, afiliados a la confederación de Choferes de Bolivia se sumaron este lunes a huelgas de hambre en varias zonas y amenazaron con un paro nacional de 48 para este jueves y viernes, en un intento por impedir la legalización de vehículos indocumentados o "chutos".
Desde primeras horas de este lunes, cientos de minibuses fueron instalados en puntos claves, así como en la autopista que comunica a La Paz con la vecina localidad de El Alto -donde se encuentra el aeropuerto- y otras zonas del país.
Miles de personas debieron caminar hasta sus lugares de trabajo, debido a los bloqueos que forzaron a cumplir a "media marcha" las actividades en esta ciudad.
"El gobierno nacional deplora, lamenta, condena esta actitud de los choferes", declaró el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Alfredo Rada, al pronunciarse sobre el tema.
"Nos parece que esta agresión a la ciudadanía no guarda ninguna relación con la dimensión del problema. El problema es local, municipal responde a esas autoridades abordarlo. Pero nos parece que de parte de la dirigencia del transporte hay una actitud verdaderamente desmedida", enfatizó Rada.
La protesta afectó incluso al Presidente Evo Morales, quien no asistió este lunes al encuentro de Pueblos Indígenas del Abya Yala, informó la agencia estatal ABI citando al vocero de gobierno, Alex Contreras. Se atribuyó esta decisión "al paro y bloqueo de calles".
Los conductores se oponen a los nuevos recorridos en las vías del casco central de La Paz, donde se iniciaron trabajos de remodelación de vías y edificaciones, y exigen que se atienda su propuesta de reorganización.
Los dirigentes del transporte se quejan de las medidas adoptadas por el alcalde Juan del Granado y amenazaron con una huelga indefinida, en caso de no ser atendidos sus reclamos.
"¿Por qué siempre se tiene que perjudicar al transporte?", preguntó Durán, quien aseguró que pueden demostrar "de forma técnica cuánto de perjuicio causa la medida del alcalde".
"(Antes) de parada a parada llegábamos en 40 minutos, ahora lo hacemos (el recorrido) en una hora y 10 ó 15 minutos y al día el chofer propietario o asalariado pierde, aparte del costo de operaciones, por el consumo del combustible", argumentó Gonzalo Millares, de la central única de transporte urbano, a la prensa.
Las autoridades capitalinas han anunciado que no cederán ante la presión de los transportistas.
"No se va a ceder frente a caprichos. La medida se mantiene, la medida se lleva adelante, la medida del plan vial, del reordenamiento vial y sobre todo se lleva adelante el plan de reordenamiento, el plan de revitalización del centro", declaró Del Granado, quien indicó que "las obras continúan".
Se informó que durante el día fueron detenidos al menos 12 transportistas.
Jhonny Bernal, de la alcaldía mayor, indicó que las obras en el centro requieren una inversión de 34 millones de dólares. "No sé si es conveniente que La Paz ceda ante una presión que rechaza el progreso paceño", señaló.
Los cortes también afectaron las rutas que conducen hacia el centro de la ciudad y otras que comunican a esa zona con las áreas residenciales ubicadas en el sur de La Paz.
En medio del paro en La Paz, los dirigentes de los choferes en todo el país amenazaron con otras protestas para exigir se atienda el pedido del sector de no legalizar los autos "chutos".
"Hay una tozudez total del poder Ejecutivo cuando no se quiere escuchar y no solamente a nuestro sector", declaró José Luis Cardozo, dirigente de la Confederación de choferes, y señaló que "producto de eso" se dio la muerte de los mineros en choques ocurridos entre el jueves y viernes en el yacimiento de Huanuni.