BUENOS AIRES.- Un delincuente se entregó este lunes tras mantener durante nueve horas a 11 niños como rehenes - sus tres hijos y ocho sobrinos-, en su casa en La Matanza, provincia de Buenos Aires.
Jorge Marone, alias "el Gordo Diente" ingresó en la madrugada de este lunes a su vivienda en el barrio Esperanza, donde se atrincheró durante nueve horas, y resistió la detención policial usando a sus propios hijos y sobrinos como escudo, quienes salieron ilesos.
Decenas de efectivos policiales rodearon la casa de Marone, donde también estaba su esposa, localizada en un barrio humilde al costado de una ruta, mientras un negociador del Grupo Especial de Operaciones Halcón intentaba convencerlo de deponer su actitud.
El "Gordo Diente" había participado de un asalto a mano armada en la noche del domingo y tras unas horas de fuga, la policía consiguió encontrarlo cerca de su casa, según informó un agente que participó del operativo.
Tras un tiroteo con la patrulla que lo perseguía, Marone, que según la policía tiene antecedentes policiales, ingresó a su vivienda y tomó como rehenes a sus hijos y sobrinos, que fueron dejados en libertad en la mañana de este lunes y se encuentran en buen estado de salud.
Vecinos del barrio contaron a medios de prensa que Marone se dedicaba a robar, que estuvo varias veces preso y que solía amenazarlos con armas de fuego.