TEHERÁN.- El Gobierno iraní calificó este viernes como infundadas las acusaciones de fiscales argentinos de que altos funcionarios de Irán estuvieron vinculados a un atentado terrorista ocurrido en 1994 en Buenos Aires.
El portavoz de la Cancillería Mohammad Ali Hosseini dijo que el sistema judicial argentino no presentó evidencia alguna sobre las acusaciones. "Es necesario que las autoridades argentinas basen sus comentarios en evidencias", dijo el vocero.
Sus comentarios se produjeron en momentos en que dos fiscales argentinos pidieron a un juez federal el arresto del ex Presidente iraní Hashemi Rafsanjani y otras siete ex autoridades por el atentado dinamitero de 1994 contra el centro judío de la AMIA, en el que murieron 85 personas y 200 resultaron heridas.
Hosseini dijo que el anuncio de los fiscales es propaganda sionista que busca desviar la atención pública de los crímenes israelíes en Palestina y Líbano.
Los otros funcionarios acusados son un ex jefe de la inteligencia iraní, un ex canciller, dos ex comandantes de la Guardia Revolucionaria, dos ex diplomáticos y el ex jefe de seguridad de la organización extremista libanesa Hezbolla.