JERUSALEN.- El gobierno israelí, reunido el domingo para discutir acerca de eventuales operaciones militares contra los disparos de cohetes desde la franja de Gaza, lanzó una contraofensiva diplomática criticando severamente una resolución de la ONU.
Los dirigentes israelíes criticaron enérgicamente una resolución votada por abrumadora mayoría por la Asamblea General de la ONU, que el viernes pidió el fin de todas las formas de violencia entre Israel y los palestinos, incluyendo las operaciones militares de Israel en Gaza y los disparos de cohetes palestinos contra Israel.
Esta resolución también pidió la creación de una misión investigadora sobre la acción de la artillería israelí que mató a 19 palestinos, en su mayoría mujeres y niños, el 8 de noviembre en Beit Hanun, en el norte de Gaza.
El Primer Ministro israelí, Ehud Olmert, denunció a las personas que "dan lecciones" en la ONU.
"Es a aquellos que disparan sistemáticamente y desde hace mucho tiempo contra los civiles (israelíes), sin que las personas que dan lecciones vean allí un motivo para hacer votar resoluciones en la ONU para condenarlos, que hay que pedir explicaciones", afirmó Olmert al comenzar la reunión semanal del gabinete israelí.
Por su parte, Peretz afirmó que "es lamentable que nadie sugiera la creación de una comisión investigadora sobre las organizaciones terroristas del movimiento islamista Hamas".
El embajador de Israel ante las Naciones Unidas, Dan Gillerman, acusó el domingo a Francia de haber "lanzado flores a los terroristas" al presionar para que se adoptase dicha resolución.
La violencia no se detiene
Tres israelíes fueron heridos el domingo por la mañana, uno de ellos de gravedad, por la explosión de dos cohetes lanzados contra la ciudad de Sderot, en el sur de Israel. Otros cuatro cohetes disparados a partir del norte de la franja de Gaza estallaron en territorio israelí, sin que se registrasen víctimas, indicó un portavoz militar.
Estos ataques se produjeron a pesar de varias operaciones y ataques aéreos israelíes lanzados desde el miércoles en el norte de la franja de Gaza en respuesta a la muerte de una israelí por la explosión de un cohete palestino.
Según la radio militar, el gobierno no decidirá una operación terrestre de gran magnitud debido a que no obtendría la mayoría de los votos de los ministros.
En cambio, varios ministros se pronunciaron a favor de "liquidaciones selectivas" de altos dirigentes del Movimiento de Resistencia Islámica (cuyo acrónimo en árabe es Hamas), que dirige el gobierno palestino desde marzo.
El ministro de Defensa israelí, Amir Peretz, advirtió nuevamente el domingo que "los responsables de los disparos de cohetes pagarán el precio".