KABUL.- Un atentado explosivo y cuatro ataques causaron la muerte de al menos siete civiles, 57 insurgentes y un soldado de la OTAN en diferentes lugares de Afganistán, informaron autoridades el domingo.
Un atacante suicida detonó una bomba en un restaurante en el sureste de Afganistán el domingo y mató a siete afganos e hirió a 20, dijeron funcionarios regionales.
El restaurante, en la provincia de Paktika, quedó destruido, aseguró el gobernador regional Mohammad Akram Akhpelwak.
El funcionario dijo a The Associated Press que el agresor tenía al parecer la misión de atacar a un comandante de fuerzas especiales afganas y a un jefe distrital que estaban en el restaurante la mañana del domingo. Ambos se encuentran entre los 20 heridos.
Paktika, que tiene frontera con Pakistán, ha sido objeto frecuente de la violencia del grupo radical Talibán.
Este año ha habido un aumento pronunciado de los ataques suicidas como parte de un incremento de los embates del Talibán en el país. Según la Organización del Tratado del Atlántico Norte, las agresiones suicidas registradas este año hasta mediados de noviembre han matado a 217 personas en Afganistán.
La Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad en Afganistán dijo que un soldado de la alianza militar OTAN y unos 57 insurgentes fueron muertos en cuatro ataques en el sur de Afganistán.
Un grupo de insurgentes atacó a fuerzas dirigidas por la OTAN el sábado cerca del distrito de Tirin Kot en la provincia de Uruzgán. Los soldados de la alianza respondieron y con apoyo aéreo dieron muerte a casi 50 insurgentes, dijo la fuerza internacional en un comunicado. Un soldado de la coalición fue muerto en el combate.
También el sábado, los insurgentes abrieron fuego en el distrito de Panjwayi en la provincia de Kandahar contra efectivos del ejército afgano y de la OTAN. Un posterior ataque aéreo de represalia mató a unos cinco rebeldes, añadió la declaración. Tres soldados de la alianza resultaron heridos.
En la vecina provincia de Zabul, unos 50 combatientes del Talibán atacaron la sede de un jefe distrital el sábado y se enfrentaron con la policía durante casi una hora. El combate dejó un miembro del Talibán muerto y otros tres heridos, dijo el jefe distrital Fazal Bari e indicó que no hubo bajas entre los policías.
En una carretera que comunica a Kabul con Kandahar en Zabul, miembros del Talibán emboscaron un convoy policial la noche del sábado e intercambiaron disparos con los agentes por unos 20 minutos, dijo el comandante de la policía de caminos de Zabul Jainani Khan. Un Talibán fue muerto.
Los ataques y enfrentamientos ocurren casi a diario en las provincias sureñas, consideradas bastiones del Talibán, donde el gobierno afgano tiene poco control.