BUENOS AIRES.- Argentina dijo hoy que confía en que la mediación de España le ayude a abrir un canal de diálogo con Uruguay para superar un conflicto por la instalación de una polémica fábrica de celulosa.
El diferendo comenzó hace más de un año debido al montaje, en el lado uruguayo de un río fronterizo, de dos fábricas de pasta de celulosa de la empresa finlandesa Botnia y la española ENCE
Ence anunció recientemente que relocalizará la planta en otro lugar de Uruguay que no detalló, por lo que el conflicto ahora se centra en la empresa finlandesa, que mantiene firme su decisión de instalarse en el conflictivo lugar.
El enviado del rey Juan Carlos de España, Juan Yáñez, se reunió en las últimas horas con autoridades de ambos gobiernos, y mantendrá nuevos contactos el miércoles y jueves en Montevideo y Buenos Aires, respectivamente.
"(España) se ha involucrado en un tema tratando que dos pueblos hermanos encuentren un canal de diálogo. Hay que apostar a esas buenas expectativas que transmite y colaborar porque está haciendo un trabajo complejo", dijo el jefe de gabinete argentino, Alberto Fernández, a una radio local.
Al diferendo se sumó en las últimas horas la recomendación de Botnia a sus trabajadores extranjeros de evitar viajar a Argentina ante posibles riesgos, según dijo un portavoz de la compañía.
Otro episodio que tensionó el diferendo en los últimos días fue la decisión del gobierno uruguayo de enviar militares para colaborar en la custodia de la planta, algo visto por Argentina casi como una señal de provocación.
Asimismo, Uruguay reiteró que no negociará con Buenos Aires mientras grupos de ambientalistas argentinos mantengan bloqueados pasos fronterizos como forma de protesta, en tanto el presidente argentino, Néstor Kirchner, dijo que no evitará esas manifestaciones.
La semana próxima, las autoridades de Ence se reunirán con el presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, en un encuentro en que se especula podrían informarle la nueva localización de la planta.
