COCHABAMBA.- Los presidentes sudamericanos hicieron el viernes en Bolivia un llamado a acelerar la constitución de una comunidad de naciones montada en la base de la integración de los recursos energéticos.
En la sesión inaugural de la II Cumbre de la Comunidad Sudamericana de Naciones, el Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, propuso a sus colegas una reunión extraordinaria el próximo año para tomar acciones concretas que lleven a la unión de los grandes recursos naturales de la región, como una vía para combatir la pobreza en el continente.
"La integración energética al lado de la de infraestructura será uno de los motores de la Comunidad Sudamericana de Naciones, lo mismo que el carbón y el acero lo fueron para la Unión Europea en los años '50", dijo Lula en su primer discurso ante el foro que se celebra en Cochabamba.
El Mandatario planteó como metas fundamentales la coordinación de esfuerzos en la exploración y distribución de petróleo y de gas; la ampliación de la interconexión de energía eléctrica y la cooperación para producir combustibles renovables como el etanol y biodiésel.
"Nuestra región dispone de las más grandes reservas de recursos energéticos del mundo", dijo Lula, quien instó a sus colegas a promover inversiones y asociaciones "que permitan su utilización en términos justos y con beneficios para todos".
A su turno, el Mandatario anfitrión, Evo Morales, dijo que tras la nacionalización de los hidrocarburos que decretó en Bolivia en mayo de este año, el país tendrá un superávit fiscal por primera vez en tres décadas.
"Es importante recuperar nuestros recursos naturales. Ahí vendrá la verdadera solución de los problemas sociales que tienen nuestros pueblos, que tienen nuestras naciones", enfatizó al dejar formalmente instalada la cumbre.
Ésa es una de las formas a través de las que Morales cree que se puede combatir la pobreza, a la que dijo han llevado años de "saqueos" de los recursos naturales de muchos países de la región y políticas impuestas por potencias internacionales orientadas a subastar esas riquezas.
"Ahora, acá estamos juntos para integrarnos, para unirnos como Sudamérica y evitar que eso se repita", dijo Morales.
El avance hacia una zona de libre comercio de América del Sur en los próximos siete años, apunta a ser otro de los pilares de la cumbre, a la que asisten todos los mandatarios sudamericanos con la excepción del Presidente saliente de Ecuador, Alfredo Palacio, y sus pares de Argentina y Colombia.
Los mandatarios electos de Ecuador, Rafael Correa, y de Nicaragua, Daniel Ortega, participan como invitados.
Unión pese a ideologías
A su llegada a la cita más temprano el viernes, los mandatarios destacaron la necesidad de unirse, independientemente de sus propias ideologías.
"Me parece tan oportuna la Cumbre Sudamericana para darle un nuevo impulso a ese nuevo modelo unitario, nunca como antes la unidad ha sido posible, hagámosla nuestra propuesta", fue el llamado del recién reelecto Presidente venezolano, Hugo Chávez.
Una voz disidente de Chávez, la del peruano Alan García, apuntó igualmente que "podemos tener puntos de vista diferentes en uno u otro aspecto, pero (...) estamos dispuestos a construir esta integración hacia una sola moneda, hacia una sola acción política que nos defina ante el mundo".
La cumbre tiene como marco el clima de tensión creado por las protestas que enfrenta el gobierno boliviano, por la resistencia de la oposición al dominio oficialista en una Asamblea Constituyente, que ha derivado en una ola de huelgas de hambre y enfrentamientos.
Un llamado a la paz en Bolivia y a respetar a Morales fue hecho a su llegada a Cochabamba por Chávez y Lula, quienes destacaron la importancia que tiene el Mandatario del país altiplánico en el concierto regional.
"Tengo mucha fe en que los soldados bolivianos junto al pueblo evitarán que ocurra en Bolivia una tragedia", expresó Chávez.