MADRID.- El presidente de la compañía aérea Air Madrid, Luis Carrillo, declaró tener la sensación de que "en las altas esferas hay algo en contra mía", al tiempo que reiteró que sus aviones eran "seguros", tras el cierre de la aerolínea española.
"Esta es una sensación que yo tengo, que en las altas esferas hay algo en contra mía", afirmó Carrillo en una entrevista que publica el diario El Mundo.
Para Carrillo, Air Madrid ha sido víctima de "una lucha política entre los partidos partidos principales (el gobernante Partido Socialista y el opositor Partido Popular) y nosotros estamos en medio, aunque no tenemos nada que ver con ninguno".
"Se ha pisado a una compañía que estaba en auge, que tenía grandes perspectivas de futuro, que abría nuevos mercados", añadió el presidente de Air Madrid, que el pasado día 15 anunció el cese de su actividad, pocas horas antes de que el ministerio de Fomento español le retirará las licencias de vuelo.
La decisión de cesar la actividad de la compañía se tomó "porque el ministerio de Fomento estaba diciendo a los pasajeros con carteles y folletos que quien volase con nosotros, probablemente no volvería, ya que en 48 horas podían revocarnos la licencia", dijo Carrillo a El Mundo.
"Nuestros aviones le puedo asegurar que son los más seguros que están volando", afirmó Carrillo, desechando las deficiencias en el ámbito de la seguridad que esgrimió, entre otras razones, el ministerio de Fomento para retirar las licencias de vuelo a la compañía, dejando en tierra a miles de pasajeros.
"Les pido mil perdones, mil disculpas, me parece una barbaridad lo que hemos hecho con ellos (los pasajeros)", añadió Carrillo, quien respondió "sí, sí" a la pregunta de si "¿va usted a intentar facilitar el reembolso de los billetes que no fueron utilizados?".
"Creo que las agencias de viaje ya están reembolsando y el resto del dinero lo tiene la IATA, tiene 13 millones y pico de euros. Yo no tengo el dinero de los pasajeros que están diciendo que les hemos estafado", afirmó.
Air Madrid presentó el jueves suspensión de pagos en los tribunales, que deberán ahora decidir si admiten o no a trámite la solicitud de la compañía.