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Protestan en Filipinas por traslado a embajada de EE.UU. de marine condenado por violación

Al menos 200 personas se manifestaron frente a la legación donde está el militar, que fue trasladado pese el rechazo de un tribunal filipino de entregarlo a la custodia de la misión diplomático estadounidense.

30 de Diciembre de 2006 | 07:56 | EFE

MANILA (EFE).- Al menos 200 personas se manifestaron hoy frente a la embajada de EE.UU. en Manila para protestar por el traslado a esa legación de un marine condenado por violación, pese el rechazo de un tribunal filipino de entregarlo a la custodia de la misión diplomático estadounidense.

La manifestación se produjo después de que el Gobierno filipino permitiera anoche a la legación estadounidense asumir la custodia del cabo Daniel Smith.

El portavoz de la embajada, Matthew Lussenhop, confirmó que Smith fue trasladado anoche de la prisión de Makati, el distrito financiero de Manila, a la legación estadounidense, siguiendo órdenes del Gobierno filipino.

"Con el traslado de Smith a la custodia estadounidense, Filipinas ha cumplido con las condiciones estipuladas en el Acuerdo de Fuerzas Visitantes", afirmó Lussenhop sin dar detalles de la decisión de Manila.


Según ese tratado entre Manila y Washington, un militar estadounidense que cometa un delito en Filipinas debe permanecer bajo vigilancia de su país hasta que finalice el proceso legal.

Los manifestantes llevaban pancartas con fotos de la presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, y de su homólogo estadounidense, George W. Bush, debajo de las cuales se podía leer: "El rey y la reina de los violadores". Los abogados de la víctima calificaron de "violación de la ley filipina" y "una clara intervención extranjera" el traslado del cabo.

La letrada Evalyn Ursua declaró que presentarán cargos criminales contra los ministros filipinos de Exteriores, Alberto Rómulo, y de Justicia, Raúl González, y todos aquellos responsables de esta decisión.

El marine fue declarado culpable de haber violado a una joven filipina hace un año cuando se encontraban en la parte trasera de una furgoneta, aprovechando que ésta estaba ebria y no podía defenderse.

Otros tres marines acusados por el mismo caso, que se encontraban en el vehículo y supuestamente animaron al agresor, fueron absueltos del cargo de complicidad en el crimen por falta de pruebas.