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Santiago: Viernes 19 de abril del 2024 | Actualizado 08:48
BAGDAD.- Más de 250 presuntos terroristas murieron en una ofensiva realizada hoy por las fuerzas de seguridad iraquíes cerca de la ciudad de Nayaf, al centro del país, en una jornada caracterizada por numerosos hechos de violencia.
La agencia de noticias Burathanews, dependiente de legisladores chiitas, informó que las fuerzas de seguridad embistieron contra estas milicias supuestamente responsables de haber planeado atentados contra clérigos chiitas.
En la operación, realizada a ocho kilómetros al norte de Nayaf, las fuerzas iraquíes recibieron apoyo de la fuerza áerea estadounidense.
La televisión iraquí se refirió a "decenas de muertos" y varios detenidos. Mientras que informes no confirmados reportaron que, en el marco de la ofensiva, un helicóptero militar estadounidense recibió disparos en un ala.
En tanto, unos 25.000 policías adicionales fueron asignados a la región de Nayaf para garantizar la seguridad de los peregrinos en ocasión de la festividad islámica de Ashura, que se celebra actualmente.
Paralelamente, tuvieron lugar redadas y ataques en Bagdad y sus alrededores. Según informó la policía, tres agentes de seguridad murieron cuando unidades de la policía y el ejército entraron en un pueblo cerca de Suwaira, 45 kilómetros al sur de Bagdad.
La redada iba dirigida contra un grupo que el sábado había atacado con granadas un puesto del Ejército iraquí.
En el oeste de Bagdad murieron un asesor del Ministerio de Industria y cuatro acompañantes que iban sentados con él en un vehículo, al ser atacados por un grupo de extremistas, informó la agencia estatal Al Irakiya.
Además, un iraquí murió al estallar una bomba en un minibús en el barrio bagdadí de Baladiyat, donde otros siete civiles resultaron heridos.
La emisora Al Irakiya informó en tanto que diez civiles murieron hoy en la localidad de Sharf al Sajr, como consecuencia de un ataque de mortero.
Otras ocho personas murieron en un atentado con coche bomba en la ciudad de Kirkuk, en el norte de Irak.
Según aseguró un portavoz policial, otros 15 civiles resultaron heridos por la detonación. La bomba estalló en un mercado para coches nuevos de un barrio habitado principalmente por kurdos y cristianos.
