WASHINGTON.- Un hombre admitió hoy ante un tribunal federal de Atlanta, en el estado de Georgia, haber contaminado la sopa de sus hijos para demandar a la empresa fabricante, dijeron fuentes judiciales.
Según el fiscal David Nahmias, William Allen Cunningham admitió que puso sustancias peligrosas en la sopa que dio de tomar a sus dos hijos y después llamó a la empresa fabricante, "Campbell Soup Co.", para decir que estaba contaminada.
En enero del año pasado, el hijo de tres años y la hija de 18 meses de Cunningham fueron hospitalizados, tras sufrir problemas estomacales.
Las autoridades dijeron que la sopa contenía picante y combustible de encendedores. En otra ocasión, utilizó medicamentos para tratar la depresión.
Después de reconocer su culpa en el marco de un acuerdo extrajudicial, Cunningham podría ser condenado a cinco años de prisión, dijeron fuentes oficiales.