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Santiago: Martes 16 de diciembre del 2025 | Actualizado 15:31
Miles de argentinos salieron a las calles de todo el país para manifestar su rechazo a la represión policial que terminó con la vida de un profesor.
EFEBUENOS AIRES.- Los maestros de Argentina iniciaron hoy una huelga de 24 horas y comenzaron a movilizarse en diferentes puntos del país para repudiar el crimen de un docente en medio de la represión policial a una protesta en la sureña provincia de Neuquén.
La medida de fuerza cuenta con un alto nivel de adhesión en los niveles inicial, medio y universitario, evaluaron dirigentes de la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina.
La huelga también fue convocada por la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), una de las dos organizaciones sindicales del país, que además de a los maestros agrupa a la mayoría de los empleados estatales.
Por su parte, la Confederación General del Trabajo (CGT), la mayor central obrera de Argentina, se adherirá al paro durante una hora, de 12.00 a 13.00 hora local (15.00 a 16.00 GMT).
Las huelgas y protestas se llevan a cabo en rechazo a la muerte de Carlos Fuentealba, un profesor de química de 42 años que falleció el pasado jueves, luego de un día de agonía, víctima de la represión de unos disturbios durante una protesta de maestros en la ciudad de Neuquén, capital de la provincia homónima.
El miércoles pasado, Fuentealba recibió en la cabeza el impacto de una granada de gas lacrimógeno arrojada por la policía para dispersar a docentes que habían bloqueado una carretera de acceso a Neuquén para reclamar mejoras salariales.
Al paro de maestros tienen previsto sumarse en forma temporal los gremios del transporte público, sanidad, bancarios y judiciales, lo que afectará el servicio de Metro, ferrocarril y ómnibus, además de la atención en hospitales.
En la capital de Neuquén, los maestros, acompañados por organizaciones sociales y sindicales, realizaron una multitudinaria marcha en rechazo a la represión policial y exigieron la renuncia del gobernador de la provincia, Jorge Sobisch.
Además, grupos de manifestantes continuaban bloqueando los principales puentes de acceso a la ciudad, situada 1.185 kilómetros al suroeste de Buenos Aires, y la sede del gobierno provincial fue pintada con consignas como "Sobisch asesino" y "Las tizas están ensangrentadas".
Mientras, en la capital argentina docentes, miembros de agrupaciones humanitarias, políticas y de desocupados comenzaron a concentrarse en el centro de la ciudad para repudiar el asesinato de Fuentealba.
En numerosas ciudades del interior del país también han sido convocadas manifestaciones y muestras de rechazo al crimen del profesor.
