BEIJING.- China teme acciones de grupos terroristas a lo largo de la ruta de la antorcha olímpica que traten de dañar la imagen del país con motivo de la organización de los Juegos Olímpicos.
"Cualquier cosa puede sucedernos, tanto en la ruta doméstica como en el extranjero, donde podría tener lugar algún ataque terrorista,” dijo a la agencia Xinhua Zhang Shuyuan, jefe del departamento de seguridad del Comité Organizador de Pekín 2008.
"Las existentes fuerzas hostiles contra China tratarán de dañar la imagen internacional de nuestro país a través de los Juegos Olímpicos", añadió, consciente de que grupos independentistas de algunas regiones de China o movimientos pro derechos humanos locales e internacionales ven en los JJOO una oportunidad para hacerse oír.
La seguridad es la prioridad número uno de Pekín de cara a los Juegos y según Zhang nadie, ni siquiera los principales altos cargos, se librarán de sufrir el pertinente control de seguridad.
"Este paso es vital para la lograr la meta de celebrar unos Juegos seguros. Nadie es una excepción a la regla, ni siquiera los oficiales de alto rango. Todo el mundo se someterá a un control de seguridad,” señaló.
Todos los recintos deportivos en Pekín tendrán un sistema para poder pedir responsabilidades, con directores de seguridad y personal especializado tanto antes como durante los Juegos.
Pekín comprobará los antecedentes personales de todo aquel que acceda a los estadios, incluidos atletas, jueces, entrenadores y oficiales.
Por otra parte, la policía armada de Pekín ha comenzado un periodo de entrenamiento que durará hasta que finalice el año, centrado en prácticas de vigilancia y patrulla.
Los cuerpos antiterroristas deberán llevar a cabo formación extra para tratar emergencias y personas relacionadas con posibles actividades terroristas.
Los 26 test preolímpicos que llevará a cabo Pekín en la segunda mitad de este año serán la perfecta piedra de toque para comprobar hasta qué punto la capital china es capaz de blindarse ante posibles atentados o revueltas.
