BRASILIA.- El gobierno brasileño designó, por primera vez desde la dictadura militar, a miembros de los servicios de inteligencia como agregados en sus embajadas en Argentina, Venezuela y Colombia, mientras estudia el nombramiento de otros en Bolivia, Paraguay y China.
Los cargos que habían sido quitados desde la década de 1980, cuando eran ocupados por el Servicio de Inteligencia Nacional (SIN), serán cubiertos por integrantes de la Agencia Brasileña de Inteligenncia (ABIN).
La información fue publicada en el Diario Oficial de la Unión, donde no se revela la identidad de los espías, llamados oficialmente como "analistas" y se informa que los gobiernos de Buenos Aires, Caracas y Bogotá están en conocimiento de la medida.
Para poder desempeñarse en sus destinos los agentes brasileños necesitarán contar con la aprobación de los gobiernos locales, similar al concedido a los diplomáticos.
Fuentes del gobierno brasileño explicaron que la función de los agentes de la ABIN será actuar en rastreo de informaciones sobre terrorismo internacional y otros asuntos relativos a la seguridad nacional brasileña.
El diario Folha de San Pablo de hoy comentó que la cancillería brasileña "siempre resistió la presencia de ABIN en las embajadas, por temer que investigasen a los diplomáticos. Pero ahora la operación fue conducida por Itamaraty con foco en la cooperación con los países vecinos".
Actualmente habría agentes brasileños en los citados países, pero trabajarían de forma encubierta algo que es de práctica en ese tipo de tareas.
Espías argentinos "disfrazados fueron identificados por la contra inteligencia de ABIN" recordó hoy el diario Folha de San Pablo.
