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Mil grados de temperatura dentro del avión

"Las probabilidades de que haya cualquier sobreviviente son prácticamente nulas", dijo el gobernador José Serra a los periodistas en el aeropuerto.

17 de Julio de 2007 | 22:35 | EFE

SAO PAULO.-  El gobernador de Sao Paulo dijo que todos a bordo probablemente habían muerto.
“Me dijeron que la temperatura dentro del avión fue de 1.000 grados, así que las probabilidades de que haya cualquier sobreviviente son prácticamente nulas”, dijo el gobernador José Serra a los periodistas en el aeropuerto.


Según los médicos en el lugar del accidente, había por lo menos 30 muertos.
“Yo estoy en el local... yo ya pude verificar 30 cuerpos carbonizados de adultos”, dijo a la cadena radial CBN el doctor Douglas Ferraz, presidente de la Sociedad Brasileña de Terapia Intensiva y quien con un equipo de cinco médicos forenses ayudaba en las labores de rescate.


Ferraz indicó que trabajaban en la identificación preliminar de víctimas, pero no ofreció otros detalles.
En Brasilia, el vocero presidencial Marcelo Baumbach dijo que el presidente Luiz Inacio Lula da Silva decretó tres días de duelo oficial, que estaba “consternado” con el accidente y que había recibido una llamada telefónica de su colega de Argentina, Néstor Kirchner, quien le manifestó su pesar por el accidente.


La televisora Globo y testigos dijeron que se produjo una gran explosión y que el fuego ya estaba controlado en el puesto de gasolina, pero que las llamas seguían en otro edificio cercano, que corría riesgo de derrumbarse.


El gobernador Serra dijo que 230 bomberos y 70 camiones estaban en el local trabajando.


José Leonardo Mota, de la oficina de prensa de la Empresa Brasileña de Infraestructura Aeroportuaria (Infraero), dijo a la AP en conversación telefónica que el Airbus 320 de TAM no logró detenerse al aterrizar en la pista del aeropuerto de Congonhas en Sao Paulo, utilizado para vuelos nacionales y que fue cerrado tras el accidente. Mota dijo no saber de víctimas.


“En este momento no podemos determinar la extensión de los daños o de posibles lesiones sufridas por los ocupantes del avión”, dijo TAM en su comunicado sin dar otros detalles. El vuelo “sufrió un accidente al aterrizar en el aeropuerto en Sao Paulo”, añadió.


Indicó que el vuelo número 3054 partió a las 17.16 horas (2016 GMT) de la sureña ciudad de Porto Alegre con destino a Sao Paulo.


Agregó que personal técnico de la TAM se encuentra en el aeropuerto y que se ha activado su plan de asistencia a “víctimas y familiares”.


La aerolínea dijo que trabajaba “con la máxima agilidad y cuidado” en confirmar la identidad de los pasajeros.


Imágenes de televisoras locales desde el aire mostraban como los bomberos habían controlado la mayor parte del fuego, pero quedaban algunas pequeñas llamas en la zona que junto con las luces de los medio centenar de camiones de bomberos y ambulancias lucían como candelabros encendidos en la oscuridad de la noche.


No estaba claro de inmediato si el fuego era del puesto de gasolina o de la nave en medio de confusos informes sobre con cuántos locales fueron impactados por el avión.
El Partido de Social Demócrata Brasileño (PSDB) dijo en un comunicado que entre los pasajeros estaba uno de sus diputados federales, Julio Redecker, jefe de la bancada del partido en la Cámara de Diputados.

Del avión Airbus 320 de la aerolínea brasileña TAM que se estrelló hoy con 176 personas a bordo “solo quedó la cola,” según declaró el gobernador del estado de Sao Paulo, José Serra, en el propio lugar del accidente.

La aeronave de 37 metros de largo y 34 de envergadura, capaz de alcanzar 833 kilómetros por hora, chocó contra un edificio de tres pisos de altura, explotó y se incendió, dijeron testigos de lo que se considera que puede ser el peor accidente en la historia de la aviación brasileña.

"Todo pasó muy rápido, fue una locura, como si el mundo hubiera acabado,” declaró a Efe Jose Carlos Gomes, quien trabajaba como clasificador de encomiendas en el edificio contra el que colisionó el avión.

El edificio pertenecía justamente a TAM Express, la filial de carga y encomiendas de TAM y estaba en las afueras del aeropuerto de Congonhas, pasando la avenida Washington Luiz, una de las más concurridas de esa ciudad brasileña.

"Lo único que vimos fue el avión venir encima y salimos corriendo. Sé que muchos compañeros no alcanzaron a salir,” explicó Gomes con la voz consternada y los ojos húmedos.

Llovía cuando el avión tocó tierra y -según testigos- el piloto no pudo completar la maniobra de aterrizaje de modo que la nave pasó de largo de la cabecera de la pista, atravesó la avenida intentando recobrar altura y fue a clavarse literalmente contra el edificio.

"El estruendo fue muy grande. Parecía una bomba, pero todos sabíamos que se trataba de un avión,” declaró Sonia Pereira, una de las dependientes de una cafetería cercana a la zona de la tragedia.

"Pudimos ver cómo una de las alas cortaba parte del edificio. Después hubo una explosión y el humo no dejó ver más,” agregó Pereira.

Hasta la medianoche del martes las autoridades habían confirmado la retirada de 14 cadáveres, pero aclararon que eran personas que no estaban a bordo del avión.

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