Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Viernes 19 de abril del 2024 | Actualizado 01:32
LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, retó la noche del miércoles a los seis prefectos (gobernadores) opositores a su gobierno a someterse junto a él a un referéndum nacional de revocatoria de mandato.
"Que el pueblo decida si respalda o no esta etapa de cambios", dijo Morales, y pidió a los prefectos opositores a aceptar este reto para evitar más muertes en el país andino de 9,4 millones de habitantes.
Evo Morales analizó hoy esa posibilidad junto a sus asesores para proponer públicamente una convocatoria para un referéndum nacional de revocatoria de su mandato y de los nueve prefectos como una salida a la actual crisis institucional.
La decisión final deberá ser aprobada en el Congreso boliviano una vez que el mandatario remita un proyecto de ley para el referéndum de revocatoria de mandato, que se realizaría en el primer semestre del próximo año.
"Es y será la vía más democrática para definir si los bolivianos están con el cambio o con la derecha fascista que no acepta una Bolivia para los bolivianos", revelaron allegados a Morales.
Por otra parte, el asambleísta por Santa Cruz Carlos Romero denunció hoy que dirigentes cívicos y autoridades de seis regiones opositoras preparan un golpe de Estado para poner fin al gobierno de Morales.
"Hay síntomas sobre un golpe de Estado que tendría como objetivo liquidar físicamente a Evo Morales (...) y no cometer el error de Venezuela cuando se dejó vivo a Hugo Chávez", alertó a los periodistas en La Paz.
Carlos Romero, uno de ideólogos del Movimiento Al Socialismo (MAS) al interior de la Asamblea Constituyente, dijo que la oposición está en plena acción combinando medidas de protesta en Bolivia y realizando campaña internacional de desprestigio al actual gobierno.
"Una huelga de hambre es una medida defensiva pero que tiene impacto interno, mientras que la campaña internacional de los cuatro prefectos es un acción planificada", dijo Romero sobre la protesta que se inició el lunes en las ciudades de Santa Cruz, Trinidad, Tarija y Cobija, donde unas 200 personas están en ayuno voluntario.
La protesta en las regiones opositoras a Evo Morales cuestiona la aprobación en grande de la nueva Constitución en un recinto militar de Sucre sin oposición y en medio de disturbios que dejaron tres muertos y 147 heridos.
También se critica que el MAS haya aprobado en el Congreso boliviano -sin participación de la oposición- una ley que recorta en 30 por ciento el presupuesto de las prefecturas para dar paso al pago de una renta vitalicia para la tercera edad, a pagarse desde enero del próximo año.
Los prefectos de Santa Cruz, Beni, Tarija y Cochabamba entregaron ayer al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, "evidencia documentada" que supuestamente demuestra cómo el gobierno de Evo Morales y sus aliados en la Asamblea Constituyente "intentan aprobar una nueva Constitución Política desconociendo al resto de las fuerzas políticas del país".
Los dirigentes cívicos del departamento de Santa Cruz, a través de Branko Marinkovic, presidente del Comité pro Santa Cruz, habían planteado hoy la necesidad de convocar a un referéndum nacional de revocatoria del mandato de Morales.
Oscar Vargas, presidente del Concejo Municipal de Santa Cruz, llegó a precisar que ese referéndum deberá incluir a los nueve prefectos y a los alcaldes de los 327 municipios de Bolivia.
"El pueblo que defina si quiere seguir siendo gobernado por Evo Morales o no", dijo Vargas, quien anunció que reforzará el grupo de huelga de hambre que se instaló en la Plaza 24 de Septiembre de Santa Cruz.
El movimiento cívico de seis de los nueve departamentos de Bolivia reiteró hoy que el sábado 15 terminará el plazo para que el gobierno responda sobre el futuro de las autonomías departamentales. De lo contrario, dijo, se implementará un modelo de autonomías de facto.
