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Presidente uruguayo clausura la XXXIV Cumbre del Mercosur

Al cierre de la reunión, Tabaré Vázquez traspasó la presidencia Pro Témpore del bloque a "la hermana" República Argentina.

18 de Diciembre de 2007 | 12:26 | DPA

MONTEVIDEO.- El Presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, clausuró hoy en Montevideo la XXXIV Cumbre de Presidentes del Mercosur y Estados Asociados, con un breve discurso antes de entregar a Argentina la presidencia Pro Témpore del bloque.


Vázquez resaltó que le era "muy grato" transferir el mando a "la hermana" República Argentina, dos conceptos que adquirieron especial significación por el conflicto que afecta a las naciones vecinas como consecuencia de la instalación de plantas de celulosa en la frontera común.


"Muy grato por el cúmulo de sentimientos, razones y proyectos. Por todo lo que une a argentinos y uruguayos que es más y mejor que lo que puede expresarse con palabras", agregó Vázquez.


El Mandatario hizo votos para que Cristina Fernández tenga éxito en su gestión. "Uruguay en su conjunto y yo sabemos que asumirá esa tarea con convicción, dedicación, responsabilidad y pasión", dijo.


Por su parte, la flamante Presidenta argentina agradeció la hospitalidad que desde anoche ha recibido en Montevideo y aseguró que se ha sentido como en su propia casa.
Criticó a los medios de prensa que durante los últimos días pronosticaban la "defunción" del Mercosur. Ésos "son los que nunca creyeron, no solamente en el Mercosur, sino que no creen en sí mismos, en la potencia de los pueblos, en la pertenencia histórica", enfatizó.


Recordó que "este Mercosur ha sobrevivido a la década del neoliberalismo en la región", cuando se proclamaba la desaparición del Estado y la preeminencia del mercado como el mejor asignador de recursos. "Si sobrevivimos a eso, está claro que este Mercosur no solamente goza de buena salud, sino que tiene excelentes anticuerpos", sostuvo.


La Presidenta argentina se pronunció a favor de profundizar el proceso de integración del bloque, aprovechando "este tiempo diferente" para la región.


En su opinión, estos países de América Latina "han vuelto a reencontrarse con su propia identidad, en gobiernos que han hecho de la democracia y la inclusión dos ejes irrenunciables de la actividad política".


Para Cristina Fernández, el desafío de los próximos seis meses que durará su gestión al frente del Mercosur será lograr unir en un código aduanero común a todos los países, para impedir que los productos de cada país tengan que pagar aranceles en una y otra jurisdicción.


"Creo también que debemos afrontar el problema de la integración productiva, la reindustrialización que está teniendo mi país y que es dable sea extendida a todas las otras jurisdicciones", dijo en su breve discurso de cierre del encuentro.


Volvió a apuntar además a quienes hacen política sucia "desde adentro y desde afuera". "Son los que hacen operaciones sucias y políticas sucias en la región, pero la política es algo maravilloso", subrayó, dirigiéndose a su colega boliviano, Evo Morales, quien momentos antes se había quejado de lo sucia que era la política, al menos en su país.


Para Cristina Fernández hay que enfrentar las "interferencias" de los que "parece que quieren países empleados y subordinados". "Y en esto tenemos que ser muy serios. No recurrir al discurso panfletario, sino al serio, sincero y genuino de que no nos van a doblegar".


Prometió también seguir luchando por la profundización del Mercosur y abogando por un mundo multipolar "que dé equilibrio a las relaciones internacionales".


"El unilateralismo ha creado sólo tragedia, dolor e inseguridad en el mundo contemporáneo. Tenemos que recuperar el equilibrio perdido", remarcó. "Y el Mercosur tiene que ser una punta de lanza" aseguró.


La XXXIV Cumbre de Presidentes del Mercosur y Estados Asociados se cerró hoy con la foto oficial en el edificio sede ubicado en la rambla montevideana, frente a las aguas del Río de la Plata.