BEIJING.- La policía de la provincia central china de Henan desmanteló una red de tráfico de niños, liberando a nueve de ellos, con edades entre los dos y los ocho años, y deteniendo a 10 personas acusadas de su secuestro, informó hoy la agencia Xinhua.
Los traficantes, detenidos en la ciudad de Nanyang, secuestraron a los niños para venderlos a familias rurales, explicó Wang Jianmin, funcionario municipal que informó de la operación policial.
La banda estaba dirigida por la familia de Ye Zengxi, de 55 años, y, en ella, también operaban su hermano, su hijo, su nuera y hasta un sobrino de 12 años, que era usado como "cebo" para atraer a los niños que luego eran secuestrados.
Los niños vivían en los distritos de Xichuan y Xixia, y ocho de ellos ya habían sido vendidos a otras familias.
Las mafias de tráfico de niños en China se dedican a vender a los varones a familias rurales que no pueden tenerlos o que ya han tenido una hija, en una sociedad todavía muy tradicional y donde aún se considera necesario tener descendencia masculina para poder asegurar el futuro económico de la familia.
De acuerdo con la política del "hijo único", vigente desde hace 30 años, los padres chinos de zonas rurales pueden intentar tener un segundo vástago si el primogénito es niña, pero está prohibido un tercer “intento” si en el segundo caso también tienen una chica.
En ocasiones, las mafias de venta de niños también se dedican al secuestro y venta de esposas en zonas rurales, donde la política del hijo único ha causado desequilibrio de sexos, con muchas menos mujeres que hombres.