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Primer Ministro italiano anuncia medidas para resolver crisis de basura en Nápoles

El Ejército estará a cargo de recolectar las montañas de desechos que desde fines de diciembre pasado se acumulan en las calles de la ciudad ubicada en el sur de Italia. Asimismo, se construirán al menos tres incineradores de basura.

08 de Enero de 2008 | 15:56 | AFP

ROMA.- El Primer Ministro italiano, Romano Prodi, anunció hoy una serie de medidas para resolver "en forma definitiva" el grave problema de la basura que sumerge a Nápoles (sur), y genera tensiones sociales y temores por la salud pública.


La batalla contra la basura de Nápoles se convirtió en una prioridad para el gobierno de centroizquierda, que fue sancionado por la Comisión Europea por violación de la legislación comunitaria en materia de desechos, un caso único en Europa.


Prodi anunció en una declaración oficial que recurrirá al Ejército en los casos urgentes y que construirá "al menos tres incineradores" de basuras, ya que la región Campaña, en donde se encuentra Nápoles, no tiene ni uno.


El anuncio de Prodi fue hecho al término de una importante reunión con varios ministros para establecer la estrategia a seguir para acabar con uno de los fenómenos más anómalos y sorprendentes que se registran en el viejo continente.


Según cálculos de la prensa italiana, más de 100.000 toneladas de inmundicia, desechos, residuos de comida, papeles, objetos rotos y desperdicios se acumulan desde fines de diciembre pasado en las calles de Nápoles, cuya población comienza a temer por su propia salud, ante la proliferación de ratas, y se niega a enviar a los niños a las escuelas.


Para resolver "definitivamente" el problema, como anunció el jefe de gobierno, Italia estableció un plan a corto y mediano plazo para la recolección y el tratamiento de las basuras en Nápoles, que vive en emergencia permanente desde 1994.


El Ejército tendrá a cargo el problema más apremiante, es decir la recolección en pocos días de las montañas de basuras, cuyo olor nauseabundo y gases venenosos no han impedido que la población local salga a protestar contra la reapertura de los vertederos, acusados de provocar enfermedades, malformaciones y leucemias.


El jefe del gobierno italiano explicó que el plan tiene como objetivo lograr que Nápoles y las ciudades aledañas sean autosuficientes, y cuenten con los vertederos necesarios para enterrar sus basuras.


"Hay que evitar recurrir a la costosa exportación de las basuras", afirmó Prodi, haciendo alusión al actual sistema empleado de trasladar las basuras a Alemania para que sean tratadas en ese país.


Para la asociación de defensa del medio ambiente Legambiente, entre los responsables de la "catástrofe" que vive Nápoles hay que incluir a las empresas especializadas en el tratamiento de basuras que ganaron las licitaciones públicas y no construyeron vertederos según las normas establecidas.


"Ojalá que esta crisis evidencie algunas verdades. Un cuarto de los desechos tóxicos e industriales producidos en el norte de Italia han sido trasladados al sur por empresas con lazos con la Camorra, la mafia napolitana", declaró el responsable de Legambiente en Campaña, Raffaele del Guidice.


En un artículo publicado esta semana, el escritor y periodista napolitano Roberto Saviano, autor del libro de denuncia "Gomorra", explicó las razones por las cuales la región Campaña se encuentra desde hace 14 años en emergencia permanente.


"Muchas personas ganan sumas inmensas con el tráfico de basuras: tanto los dueños de los vertederos, como lo demuestra el abogado empresario del pueblo de Parete, entre los hombres más ricos de la región, como las firmas alemanas involucradas. Pero sobre todo la Camorra, que obtiene ganancias en todas las transacciones y cuenta para ello con políticos amigos", escribió.


Para dirigir el plan gubernamental, Prodi nombró en forma provisional (por 120 días) como "comisario extraordinario" al ex jefe de la policía Gianni De Gennaro, quien fue reemplazado en junio de este año por las denuncias e investigaciones judiciales relacionadas con los enfrentamientos entre policía y manifestantes anti-globalización durante la cumbre de los países del G-8 en Génova en 2001.


Prodi no hizo alusión alguna a las protestas y motines que desde hace varios días se organizan en Pianura, pueblo símbolo de la crisis, contra las fuerzas del orden para oponerse a la reapertura de un vertedero.


Pese al anuncio gubernamental, las manifestaciones de protesta en Pianura, no se detuvieron y más de 500 personas ocuparon la entrada del basurero.