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Atribuyen a "presión" anuncio de las FARC de entrega de rehenes

De acuerdo con el máximo jefe militar de Colombia, general Freddy Padilla, el grupo guerrillero lo hace previendo la jornada de protesta de mañana.

03 de Febrero de 2008 | 11:46 | DPA

BOGOTÁ.- El comandante de las Fuerzas Militares de Colombia, general Freddy Padilla, dijo hoy que el anuncio de la guerrilla de las FARC de liberar a tres ex congresistas que tiene como rehenes se debe a la "presión" que ejercerá la jornada de protesta de mañana contra ese grupo armado.


Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron a última hora de este sábado que decidieron liberar a Gloria Polanco, Luis Eladio Pérez y Orlando Beltrán, secuestrados cuando eran legisladores en acciones cumplidas entre junio y agosto de 2001.


El grupo guerrillero dijo que las liberaciones se debían a problemas de salud de los rehenes y pidió la colaboración del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y de la senadora colombiana Piedad Córdoba, quienes entre agosto y noviembre del año pasado fueron mediadores en busca de un canje de secuestrados por rebeldes presos.


"Ésta es la primera consecuencia de la presión de los jóvenes para decirle a los terroristas que no están de acuerdo con el secuestro y la extorsión", dijo Padilla.


El máximo jefe militar del país se refirió a la jornada de protesta convocada para mañana en Colombia y varios países para rechazar las acciones de las FARC, en una campaña que nació el mes pasado por iniciativa de algunos jóvenes en la red social en Internet Facebook.


Según el ministro del Interior y Justicia, Carlos Holguín, el gobierno se complace con esta decisión, ya que siempre ha sostenido que las FARC deben liberar a los cautivos sin importar la forma o ante cuáles personas se hace la entrega.


"Ojalá que sea cierto. Estos actos son bienvenidos. Pueden entregarlos donde quieran, como quieran y ante quienes quieran con tal de que liberen a los secuestrados", dijo Holguín.


"Respuesta anticipada"


A su turno, el ex presidente colombiano Ernesto Samper (1994-98) dijo que el anuncio de alguna manera debe ser interpretado como una "respuesta anticipada" a la jornada contra las FARC, que no desvirtúa el propósito de seguir protestando por el secuestro.


El presidente de la Conferencia Episcopal Colombiana, monseñor Luis Augusto Castro, comentó que la liberación debe ocurrir "cuanto antes" y pidió que el mismo procedimiento sea aplicado en el caso de los demás rehenes.


Los familiares de Polanco, Pérez y Beltrán coincidieron en señalar que se trata de "la mejor noticia" recibida en los últimos años y que aguardan el desarrollo de los acontecimientos.


El anuncio se produjo después de que el pasado 10 de enero las FARC dejaran en libertad a la ex congresista Consuelo González y la ex candidata a la vicepresidencia Clara Rojas, que habían sido tomadas como rehenes en septiembre de 2001 y febrero de 2002, respectivamente.


Las FARC dijeron en esa oportunidad que se trataba de un gesto unilateral con el cual buscaban desagraviar a Chávez por la forma en que su homólogo colombiano, µlvaro Uribe, canceló la mediación que cumplió en busca de un canje de rehenes por guerrilleros presos.


Durante el tiempo en que Chávez y Córdoba mediaron entre las partes, las FARC dijeron que estaban dispuestas a liberar a entre 47 y 50 rehenes -entre ellos la ex candidata presidencial Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y varios políticos, militares y policías- por al menos 500 guerrilleros presos, incluidos dos extraditados a Estados Unidos.


Uribe dio por terminada la fase de mediación con el argumento de que Chávez y Córdoba fueron "indiscretos" e incurrieron en "fallas de método", lo cual dio origen a una aguda tensión entre Colombia y Venezuela, que cada día parece profundizarse más.


Las FARC exigen para hacer el canje el despeje militar de una zona del suroeste de
país, lo cual es rechazado por el gobierno, que en cambio propone hablar en una "zona de encuentro" en la que los interlocutores deben estar desarmados y bajo la mirada de observadores internacionales.


Uribe dio hace algunas semanas un aval a los gobiernos de España, Francia y Suiza para que busquen fórmulas de arreglo.