CARACAS.- Los familiares de los tres secuestrados que la guerrilla colombiana de las FARC anunció que liberará, permanecerán en Venezuela hasta que esa oferta se concrete, informó hoy el ministro venezolano de Relaciones Exteriores, Nicolás Maduro.
"Ellos han decidido permanecer en el país hasta que sus familiares sean entregados. Nosotros respetamos esa decisión y la acompañamos muy solidariamente, porque ellos han encontrado en el Gobierno del Presidente (Hugo) Chávez, y de parte de todos los venezolanos, un espíritu de amor y solidaridad que no han encontrado en ninguna otra parte", dijo Maduro.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) anunciaron en un comunicado fechado el 31 de enero que entregarán al Gobierno de Chávez a los ex parlamentarios Gloria Lozada de Polanco, Luis Eladio Pérez y Orlando Beltrán.
La liberación corresponderá a un nuevo "desagravio" a Chávez por haber sido abruptamente cesado por su colega de Colombia, Álvaro Uribe, como mediador para un "canje humanitario" de secuestrados por guerrilleros presos.
En un gesto de "desagravio" previo, delegados de Chávez y miembros del Comité Internacional de la Cruz Roja recogieron el mes pasado en las selvas colombianas a dos políticas de ese país secuestradas por los rebeldes.
Tras ello, Chávez pidió a Colombia y a la comunidad internacional retirar a las FARC de las listas de organizaciones terroristas y reconocerlas como fuerza beligerante, lo que le ha valido críticas en el exterior y también de sus opositores internos.
Sobre éstos últimos, Maduro dijo que "da vergüenza ver a personajillos de la oposición venezolana arrodillados a la embajada norteamericana, al Gobierno de Estados Unidos de Norteamérica, a la oligarquía colombiana (...), arrodillados a los peores intereses y en contra de la propia patria".
Chávez reveló hace dos días que recibió una carta del jefe de las FARC, "Manuel Marulanda", en la que ratifica que en los próximos días liberará a esos tres rehenes.
El Presidente de Venezuela "instó" a "Marulanda", alias de Pedro Antonio Marín, a seguir "buscando fórmulas para la liberación de todos" los secuestrados y subrayó que el camino en busca de una solución humanitaria para el conflicto colombiano "va a seguir".
Chávez habló entonces en compañía de la congresista colombiana Piedad Córdoba, también cesada por Uribe como mediadora, y familiares de los tres ex parlamentarios.
Sobre la salud de los secuestrados dijo que "no podría saber en qué condiciones se encuentran", pero añadió que "entendía" que ninguno de ellos se encontraba "en un estado de gravedad".
