La Comisión Electoral espera ofrecer los primeros resultados de la votación a eso de las 18.00 GMT.
APISLAMABAD.- Este lunes unos 81 millones de paquistaníes están convocados a las urnas para elegir a los representantes de su Asamblea Nacional y de sus cuatro Parlamentos provinciales.
Cerca de 64.000 colegios electorales abrieron sus puertas a las 8.00 horas locales (3.00 GMT), y cerrarán a las 17.00 (12.00 GMT), según la Comisión Electoral, que espera ofrecer los primeros resultados de la votación a eso de las 23.00 horas (18.00 GMT).
Pakistán vota tras una campaña marcada por la violencia desde el asesinato en diciembre pasado de la principal líder de la oposición, la ex Primera Ministra Benazir Bhutto, al término de un mitin en la ciudad de Rawalpindi, vecina de Islamabad.
Aquel asesinato llevó a las autoridades a posponer los comicios por 40 días y obligó a los candidatos a rodearse de fuertes medidas de seguridad en sus escasos actos públicos.
Pese a ello, varios han sido los ataques. El último se registró el día final de la campaña contra la sede del Partido Popular (PPP) de Bhutto en la región tribal de Kurram (oeste), en el que murieron 47 personas y un centenar quedaron heridas.
Gran despliegue policial
La seguridad se ha convertido en uno de los elementos esenciales en este proceso electoral, que ha llevado al despliegue de 81.000 soldados y paramilitares y de 305.000 policías para garantizar el mantenimiento del orden.
Los soldados y paramilitares vigilarán los 8.928 colegios electorales -el 14 por ciento del total- catalogados como "muy sensibles" por el Gobierno, que ha calificado como "sensibles" otros 19.380 centros de votación.
La mayoría de los colegios se encuentran en la provincia nororiental de Punjab, que con 44,6 millones de electores obtendrá 183 de los 342 escaños del futuro Parlamento.
En Punjab, con un 10 por ciento de colegios electorales "muy sensibles", el Gobierno ha desplegado 130.000 policías y unos 48.000 soldados y paramilitares o "rangers".
La sudoriental Sindh, con 19,5 millones de votantes y 75 asientos en el Parlamento, tiene casi un 12 por ciento de colegios "muy sensibles" y será vigilada por 13.500 soldados y "rangers" y 100.000 policías.
En la Provincia de la Frontera del Noroeste, con 10,8 millones de electores y 43 escaños parlamentarios, un 9 por ciento de los colegios "muy sensibles" serán vigilados por unos 6.000 soldados, mientras la policía destacará en el resto unos 50.000 agentes.
En Baluchistán, con 4,3 millones de electores y 17 asientos en la Asamblea, el Ejército ha destacado unos 7.500 soldados y la policía 25.000 efectivos para vigilar sus colegios, casi un tercio de ellos calificados de "muy sensibles".
Los electores de las cuatro provincias paquistaníes elegirán también a los diputados de sus asambleas provinciales.
Finalmente, en las llamadas "agencias" tribales pobladas por pastunes en la frontera con Afganistán, un censo de 1,3 millones de personas escogerá únicamente a sus 12 representantes en el Parlamento central; mientras medio millón de votantes de la capital federal, Islamabad, elegirán a dos diputados.
Los diez restantes escaños de la Asamblea Nacional están reservados a representantes de la población no musulmana del país.
Aunque los paquistaníes pueden elegir entre candidatos de 49 partidos políticos distintos, tres se disputan la mayoría del voto: la Liga Musulmana de Pakistán-Q (PML-Q), que apoya al Presidente, Pervez Musharraf, y está liderada por Chaudhry Hussein; el Partido Popular de Pakistán (PPP) que dirige el viudo de Benazir Bhutto, Asif Zardari; y la Liga Musulmana de Pakistán-N del ex Primer Ministro Nawaz Sharif.
También concurre el partido religioso Jamiat Ulema e Islam, principal miembro de la alianza Muttahida Majlis-e-Amal (MMA), que fue la gran sorpresa de las elecciones de 2002 al erigirse como tercera fuerza parlamentaria tras la PML-Q y el PPP.
El resto de los miembros de la MMA llamó a boicotear la votación del lunes, al igual que los representantes de la minoría baluchi.
La Unión Europea envió a Pakistán al principal equipo de observadores, de 130 miembros, que se desplazarán por todo el territorio a excepción de aquellas zonas consideradas "muy sensibles".
"No ha sido una prohibición del Gobierno, sino que por razones de seguridad se ha optado por no ir a las áreas más complicadas", explicó el líder de la misión, el alemán Michael Gahler, quien ofrecerá su evaluación dos días después de la votación.