SAN JOSÉ.- La Iglesia Católica está presta a acompañar la misión médica que enviará Francia a Colombia para atender, si las FARC autorizan, a la rehén franco-colombiana Ingrid Betancourt, dijo hoy el obispo del departamento de Guaviare, Guillermo Orozco.
"Si solicitan nuestro acompañamiento, nuestra decisión es ayudar", señaló el prelado, evocando la mediación que ha ofrecido la Iglesia para el canje de 39 secuestrados, entre ellos Betancourt, por 500 rebeldes presos, propuesto por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El obispo añadió que "la presión internacional" puede llevar a la guerrilla marxista a aceptar la misión francesa, autorizada el martes por el Presidente colombiano Álvaro Uribe, quien se comprometió con su par francés, Nicolas Sarkozy, a suspender las operaciones militares en el área adonde ingrese el personal.
La comitiva sería acompañada por el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
"Si Ingrid muere, las FARC pagarían un precio muy alto ante el mundo", advirtió Orozco en San José, unos 400 km al sureste de Bogotá y capital del departamento de Guaviare, donde pobladores dijeron haber visto a Betancourt en las últimas semanas en grave estado de salud.
Según esas versiones, la dirigente política en cautiverio desde hace seis años tiene hepatitis B y leishmaniasis, y ha sido tratada en puestos de salud de varios poblados.
El gobierno colombiano mantiene una autorización a la Iglesia, España, Francia y Suiza para buscar el canje, pero las FARC vetaron recientemente a la iglesia y a Madrid argumentando que tomaron partido por Uribe.
Orozco recordó que a finales de 2007 él y sus colegas de varias regiones con presencia guerrillera le enviaron una carta al Secretariado (cúpula) de las FARC ofreciendo mediar para el intercambio, sin obtener respuesta.
También indicó que su diócesis cuenta desde hace algunos años con una comisión, integrada por tres sacerdotes, para eventuales contactos con los guerrilleros.