BAGDAD.- El gobierno iraquí y dirigentes partidarios pidieron a todos los partidos políticos disolver sus milicias antes de las elecciones provinciales, en un probable intento de aislar al religioso chiíta Moqtada al Sadr.
El Consejo para la Seguridad Nacional, que engloba al presidente, el primer ministro y los jefes de bloque del Parlamento, difundió una declaración de 15 puntos durante una conferencia de prensa hoy en Bagdad.
La iniciativa arriba tras duros choques entre las fuerzas de seguridad y la milicia del Mahdi, de Sadr, en Irak meridional y Bagdad.
La declaración -que no cita explícitamente a los hombres de Sadr- pide a las milicias entreguen las armas.
"Se deben dedicar a actividades políticas si quieren participar en el proceso político y en las próximas elecciones", afirma el documento, leído por el presidente iraquí Jalal Talabani.
El movimiento de Sadr tiene 30 bancas (sobre 275) en el Parlamento.
"Quieren desarmar a los sadristas, cuyas armas apuntan a las fuerzas de ocupación (los militares estadounidenses)", dijo, por su parte, Nassar al-Rubaie, jefe del bloque sadrista.