LONDRES.- El propietario de la tienda londinense Harrods, el multimillonario egipcio Mohamed Al-Fayed, planea apelar el veredicto del jurado en la Corte Suprema de Londres por la muerte de Diana y reiteró hoy que los servicios de inteligencia británicos estuvieron detrás de la muerte de su hijo Dodi y de la princesa de Gales.
En tanto los hijos de Diana, los príncipes William y Harry, y el único sobreviviente del choque, el guardaespaldas Trevor Rees, aceptaron las conclusiones del jurado, que falló que Diana y Dodi murieron como consecuencia de negligencia por parte del auto en el que viajaban, el francés Henri Paul, y de los fotógrafos que lo perseguían.
"Es posible que el MI6 estuviera involucrado", afirmó la portavoz oficial de Al-Fayed, Katharine Witty, en entrevista con la BBC."Nosotros seguimos diciendo que es posible pero aún no sabemos si podremos hacer algo.
El aún está reflexionando sobre las ramificaciones del veredicto", agregó respecto de Al-Fayed.Fuentes allegadas al magnate indicaron al vespertino Evening Standard que es muy probable que el egipcio apele la sentencia.
El juez que entiende en la causa, Scott Baker, afirmó que "no existe ninguna evidencia" que justifique las acusaciones de Al-Fayed, acerca de que el príncipe Felipe de Edimburgo ideó un complot de asesinato que ejecutaron los servicios secretos británicos, para evitar que Diana se casara con un musulmán y tuviera un hijo con él.
El dueño de Harrods sostuvo que no es el único "que cree que ellos fueron asesinados". "Diana predijo que sería asesinada y cómo ocurriría. Así que estoy decepcionado", comentó.
Insistió además en que la reina Isabel II de Inglaterra y su esposo "deberían haber sido llamados" a declarar como testigos. "Nadie debería estar por sobre la ley. Siempre creí que el príncipe Felipe y la reina tienen evidencia muy valiosa que sólo ellos conocen", agregó.
En oposición, Trevor Rees se hizo eco de las declaraciones de William y Harry, y trató de poner punto final.Rees, que sufrió heridas severas en su rostro por el choque en París, el 31 de agosto de 1997, sobrevivió porque era el único pasajero del vehículo que llevaba el cinturón de seguridad.
"Espero que esto represente ahora el punto desde el cual todos aquellos involucrados podamos seguir adelante", sostuvo el ex guardaespaldas real.Por su parte, los hijos de Carlos y Diana se mostraron a favor del veredicto y elogiaron especialmente a Rees.