WASHINGTON.- La visita del Papa Benedicto XVI a Estados Unidos desde hoy y hasta el domingo estará rodeada de las más estrictas medidas de seguridad.
A pesar de ello, el pontífice no dejará de realizar algunos de los trayectos en el "Papamóvil" por las calles de Washington y Nueva York. Será la primera visita de un Papa a Estados Unidos después de los atentados del 11 de septiembre.
Y en el ambiente flota la reciente amenaza de Osama bin Laden. El líder de Al Qaida acusó a Benedicto XVI a través de una grabación hecha pública el mes pasado de interpretar "un gran papel" en una "nueva cruzada" contra el islamismo.
El jefe de la policía de Nueva York, Ray Kelly, aseguró a la cadena de televisión CBS que los actos del Papa equivalen a poner en marcha en un mismo día los dispositivos previstos para una Asamblea General de Naciones Unidas, un desfile por las principales calles de Manhattan y una visita del presidente de Estados Unidos.
Desde hace tiempo, según publicó el diario "The Baltimore Sun", el servicio secreto estadounidense revisa con periodicidad todos los lugares en los que estará o por los que pasará Benedicto XVI.
En algunos, como en la Universidad Católica de Estados Unidos, donde el Papá se dirigirá el jueves a los rectores de las universidades católicas del país, se ordenó reasfaltar las calles de acceso y bloquear las ventana con vistas a donde estará el Papa.
Lo más complicado, sin embargo, es proteger al pontífice cuando esté en la calle. Hasta ahora la Conferencia Episcopal estadounidense sólo anunció sus apariciones en Washington en el "Papamóvil", que serán tres.
Después de entrevistarse mañana con Bush en la Casa Blanca, el pontífice se desplazará en su vehículo hasta la Nunciatura, pasando por la famosa Avenida de Pennsylvania que conecta la sede de la presidencia de Estados Unidos y el Capitolio, hogar del Congreso.
Por la tarde, el Papa podrá ser visto de nuevo en su traslado a su reunión con los obispos estadounidenses. Y el jueves hará lo mismo al acudir a su encuentro en la Universidad Católica de Estados Unidos.
Además, el Papa oficiará en la mañana del jueves una misa en el recién inaugurado estadio de béisbol de los Nationals de Washington, ante una audiencia de unas 45.000 personas.Aún se desconocen los recorridos en Nueva York, donde el Sumo Pontífice estará entre el viernes por la mañana y el domingo.
Sí se sabe sin embargo que Benedicto XVI cerrará su estancia en la ciudad de los rascacielos con una nueva misa multitudinaria en un estadio de béisbol, esta vez en el de los New York Yankees.