Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Jueves 25 de diciembre del 2025 | Actualizado 19:51
RIO DE JANEIRO.- Al menos cuatro personas murieron el viernes elevando a quince el número de víctimas fatales en cuatro días consecutivos de tiroteos entre policías y supuestos traficantes en una favela de Río de Janeiro, informaron fuentes oficiales.
En el intercambio de disparos del viernes tres personas perdieron la vida, mientras que un hombre que ingresó el pasado martes con una herida de bala de fusil en el abdomen, falleció en el hospital.
El martes último, día en que comenzaron las hostilidades, nueve hombres murieron en enfrentamientos con la policía. Todos ellos fueron calificados como traficantes.
El pasado jueves dos personas más se sumaron a la lista de muertos por el conflicto, entre ellas un joven de 16 años que, según la policía, trabajaba para los traficantes y había disparado primero.
En los cuatro días de tiroteos al menos otras cinco personas han resultado heridas, incluyendo dos mujeres, que fueron alcanzadas por balas perdidas. En tanto, doce supuestos traficantes fueron arrestados.
Tras el tiroteo del viernes la policía incautó una bomba molotov realizada en una botella de vino de cinco litros, una granada, una carabina y una cantidad de marihuana que no fue precisada.
Durante el primer día de operaciones la policía también obtuvo material militar, como una ametralladora de calibre 30 milímetros, normalmente usada para derribar helicópteros.
El coronel Alberto Pinheiro Neto, del cuerpo de elite de la policía militar, aseguró que la situación está "tranquila" y "dominada", en este conjunto de favelas conocido como Penha, ubicado en la zona norte de Río de Janeiro.
Según estadísticas oficiales, la policía de Río de Janeiro mató el año pasado a 1.330 personas en tiroteos de esta naturaleza.
La mayoría de las 500 favelas de la ciudad están controladas por bandas de narcotraficantes fuertemente armados, en las que nunca entran las fuerzas de seguridad del estado, si no es para intentar deponer a los delincuentes con métodos violentos, muy criticados por diversas organizaciones no gubernamentales.
