BUENOS AIRES.- La mayoría de los gobernadores oficialistas comienza a distanciarse del gobierno argentino de Cristina Fernández, a raíz del conflicto con los productores rurales, que prosiguen con sus cortes intermitentes de rutas y amenazan con endurecer sus medidas de protesta.
Los gobernadores y legisladores del interior del país, presionados por los productores de sus provincias, piden la reanudación del diálogo entre el gobierno y los ruralistas y se han ofrecido incluso como mediadores.
Muchos de ellos han comenzado a criticar públicamente al gobierno de Fernández y se percibe un resquebrajamiento del férreo control partidario que desde 2003 habían mantenido el ex Presidente Néstor Kirchner y su esposa.
Los legisladores nacionales de Córdoba (centro del país) y Entre Ríos (litoral) emitieron en los últimos días un documento crítico hacia la posición del gobierno y en el que piden que se restablezca el diálogo.
Jorge Busti, ex gobernador de Entre Ríos y actual presidente de la Legislatura provincial, participó de un corte de rutas (piquete) en su provincia y enfatizó que comparte la demanda de los productores.